¿Es posible cambiar el contexto del mundo?

Por Bvillar1970

Por Bernardo Villar

Ayer en la madrugada venía de vuelta a casa en la carretera con dos amigos platicando acerca del estado de mi país, la situación sobre la seguridad y en general sus resultados como nación. Ricardo, uno de los amigos de los que les hablo me preguntó cómo creía yo que pudiera cambiar algo, cómo México podría ser diferente. (estoy dando por hecho que esto aplica en todos lados).

Ricardo proponía castigar a los corruptos, ser duros con el crimen, aprender lo que hacen en otros países que no tienen nuestros problemas. Yo me quedé pensando un rato sobre esa pregunta. ¿Qué se puede hacer para cambiar mi país? ¿Qué se puede hacer para cambiar el mundo?

Mi respuesta fue: Cambiando el contexto. El contexto lo es todo. El contexto abre posibilidades, habilita acciones. Todo lo que hay es porque el contexto lo permite, todo lo que no hay ocurre fuera de ese contexto, pero para efectos no son accesibles. A efectos prácticos no existen.

Los grandes cambios en la humanidad han significado un cambio de contexto. La revolución Francesa, por ejemplo, significó un cambio de contexto en la humanidad, develó posibilidades que no existían antes y creó nuevas verdades, nuevas posturas que hicieron que las antiguas fueran obsoletas haciendo imposible dar marcha atrás. Los cambios de contexto es lo que causan, que las realidades anteriores no lo sean más.

¿Pero entonces, cómo cambias el contexto de un país? ¿Del mundo?

Después de darle muchas vueltas estuve seguro de mi respuesta: Tal vez haya muchas posibilidades de cambiar el contexto del país y del mundo, pero la que en este momento puedo ver y está disponible para mi es la Transformación. La transformación como es, no como te la quieren vender muchos. No me refiero a salir por la calle a dar abrazos y cantar canciones cursis; me refiero a la transformación como una herramienta para habilitar a otras personas a elegir nuevos paradigmas, nuevos contextos personales que abran para cada individuo en particular nuevas maneras de experimentar el mundo y por lo consiguiente, nuevas maneras de actuar que causen su vez nuevos resultados.

No me refiero a que todos los seres humanos tengan que pensar del mismo modo, eso sería un lavado de cerebro, me refiero a que si una persona crea un nuevo contexto personal distinto a cómo las cosas son de hecho en este momento (lo que UNO hace) y vive desde la autenticidad y desde una visión más grande de esta misma persona, y repetimos esto en la mayor cantidad de personas, al cambiar el contexto de cada vez más seres humanos, al poder ver nuevas posibilidades de acción cada vez más personas, el impacto en el mundo comenzará a sentirse, y si llega a haber una cantidad suficiente de personas viviendo desde un contexto personal distinto al que existe actualmente en el mundo eventualmente la balanza se moverá y la antigua verdad no lo será más.

¿Esto significa que solo la transformación podría ser la diferencia? No. ¿Significa que entonces la transformación es una jornada moral? No. ¿Significa entonces que tenemos que ir por la vida llevando gente a los talleres de transformación? Tampoco. Significa que si quiero cambiar lo que hay, requiero tener claro lo que no hay, es decir qué es lo que quiero crear y elegir vivir por ello, ser esa visión, enrolar viviendo mi visión. Si quiero cambiar al mundo primero requiero ser yo ese cambio que quiero crear. El impacto de una sola persona comprometida con su visión en su entorno es increíblemente poderoso. Y si ese impacto personal se multiplica, los resultados serán insospechados

¿Los resultados serán los ideales si logramos cambiar el contexto? Tal vez, o seguramente no, pero al ser distintos albergarán nuevas posibilidades de acción.