Entre las secciones que tenemos en el blog, Chisco y VicFS comenzaron una que consistía en hablar de cuentas de Twitter interesantes, principalmente por su humor ocurrente y a menudo ácido. Últimamente la tenían un tanto abandonada, hasta que recordé que seguía una cuenta que resultaba perfecta para la sección. Así fue cómo entré el otro día en la redacción como un elefante en una cacharrería al grito de “¡PAREN LAS ROTATIVAS!”. Vic me dijo que me tranquilizase un poco y me dejase de rotativas ni historias, que aquello no era el Daily Planet. Cuando le conté que quería hacer una entrada sobre una tal esaotra que tiene cuenta en Twitter, me hizo las preguntas de rigor: rubia o morena, talla de sujetador, y todo eso. Yo me limité a sacar el móvil y a enseñarle sus tuits. No hizo falta seguir hablando.
Llegué a la cuenta de esaotra por una recomendación de Fulano Magnético. Si el autodenominado opositor a bufón advertía sobre las perlas que soltaba la niña, es que la cosa prometía. Y asustaba. Pero me arriesgué. Esaotra es lo que podríamos llamar un perfil semioculto, un pseudónimo de alguien que no se esconde del todo. La chica que no termina de enseñar su rostro es ella. Si seguimos las actualizaciones de su perfil, podremos ver alguna foto en la que se le vea la cara, e incluso nos enteraremos de su verdadero nombre y a lo que se dedica. Pero mientras tanto, seguirá siendo esa otra, y entre las sombras jugará a lo que mejor sabe: dejar a sus followers con la boca abierta gracias a sus tuits.
Porque esaotra te descoloca. Parece que va a soltarte la frase más romántica de tu vida y a mitad de camino da un giro que acaba sacándote los colores. Y en sólo 140 caracteres. ¿Alguien da más por menos? Últimamente la política está calando en sus tuits, aunque (casi) siempre mantiene esa ironía que la caracteriza. Tampoco suele ser de las que enlazan mucho. Principalmente lo hace a las actualizaciones de su blog, que no son muchas, aunque es cierto que últimamente han aumentado algo en número.
Y es que esaotra tiene un blog, donde sigue siendo esa otra. Y lo creais o no, en él escribe poemas. Son poemas que no abandona su temática habitual, aunque mucho más sutiles, pero no por ello menos interesantes. Desde hace poco tiempo, también publica sus colaboraciones ante los oyentes de La noche despierta de Radio Euskadi (sí, es de Bilbao), donde comenta brevemente algún tema de actualidad.
Si todavía no se convencen, 140 caracteres valen más que mil palabras. Aquí tienen algunas de sus últimas perlas.