Según sus propias palabras, el ex técnico de la selección mexicana fue a ver a la podóloga para verificar rumores de que daba masajes en las articulaciones en lugar de limitarse a la función de cuidar uñas y pies, y quizás se exaltó en su forma de reclamar, aunque nunca hubo abuso. "¿Por qué fue vestido de esa manera a tratar de averiguar por qué daba masajes", cuestionó Vergara.
El escándalo provocó el cese fulminante de La Volpe del equipo, menos de un mes después de haber tomado las riendas. El dueño de las Chivas, uno de los equipos más importantes del fútbol mexicano, dijo que La Volpe firmó el finiquito laboral el martes y que se le ha pagado todo lo que le corresponde, aunque el abogado del técnico asegura que formalmente aún no ha sido despedido.
"Eso demuestra que está mintiendo, igual que como está mintiendo con el asunto de la podóloga", dijo Vergara.
La Volpe dijo que se ha pasado las horas llorando desde que saltaron las acusaciones, no tanto por su carrera sino por su buen nombre. "Es una cuestión de familia, de haber ensuciado algo que me va a tener que comprobar, probar ante la justicia".