Escena eliminada de la primera parte del final de Harry Potter.
Antes de abandonar la casa de Privet Drive, Petunia le comenta a Harry apenada que ha estado viviendo allí durante 20 años y que ahora, en tan sólo una noche, debe irse. Su sobrino le explica que [los mortífagos] pueden torturarlos si creen que pueden conocer su paradero, a lo que ella responde que sabe de lo que son capaces, que no sólo Harry perdió a su madre en Godric’s Hollow, sino que ella perdió a una hermana.
Una pena que la cortaran…es el gran momento de tía Petunia.