El Tamu Massif tiene una altura de 4 km y una extensión de 650 km. Aunque ya fue descubierto hace años, no se había conseguido medir su extensión hasta hace apenas un año. Su descubrimiento no fue fácil ya que Tamu encontró el mejor de los escondites en las profundidades del Océano Pacífico. Gracias a los estudios iniciados hace ya 20 años se ha descubierto que Tamu tiene sólo un punto de salida del magma. Las muestras de roca que se han analizado datan este coloso en 140 millones de años.
Este volcán se encuentra a unos 1.500 km al Este de Japón, en una meseta submarina del Pacífico Norte llamada Shatsky rise.
Las mesetas submarinas son grandes extensiones relativamente planas que se elevan por encima del nivel del lecho marino. Estas mesetas pueden estar compuestas por corteza continental o bien por restos submarinos de grandes provincias ígneas, como es el caso de la meseta donde se encuentra el Tamu Massif. Esta circunstancia fue la que en un principio llevó a pensar a los investigadores que el origen de este supervolcán se debió a la erupción de varios volcanes a la vez localizados en esta misma región, y que terminaron por formar esta megaestructura. Estudios posteriores con ondas sísmicas, demostraron que se trataba de un único volcán formado por flujos masivos de lava que emanaron del centro para formar esta espectacular estructura.
Sea cual sea su origen, lo cierto es que este descubrimiento proporciona a los geólogos datos muy interesantes sobre el comportamiento del interior de la tierra. Se sospecha que pueda haber más superestructuras escondidas en las profundidades de nuestros océanos, de hecho hay investigaciones abiertas sobre éstas recónditas regiones que podrían aportar en un futuro nuevos datos reveladores.
Buen escondite Tamu, pero te hemos encontrado! Ha pasado mucho tiempo y te has quedado dormido. Puedes decirnos donde se esconden tus otros amigos?, no les diremos que nos lo has revelado tú…
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