Escrito en el agua
“Tenía medio y estaba a la espera de que llegara algo. Y lo esperaba en el lugar equivocado, porque el enemigo no estaba ahí fuera, sino que ya había entrado en caso y se sentaba ante su chimenea.”
Fragmento de Escrito en el agua de Paula Hawkins
Escrito en el agua es la historia de la Poza de las Ahogadas y la larga tradición de muertes (accidentales o no) de mujeres que allí se han sucedido. En un pequeño y aburrido pueblo inglés, sus habitantes se han acostumbrado a que alguna desdichada “ahogue” sus penas en la poza. La última en hacerlo, resultará ser la polémica Nel Abbott que estaba escribiendo un libro sobre todo este asunto en el momento de su muerte. Su hermana Jules, con la que tenía una complicada relación, acude de inmediato y se ve teniendo que hacerse cargo de su problemática sobrina Lena, quien la aborrece. Su hija parece convencida de que se suicidó, pero a Jules le resulta difícil imaginar a su hermana haciendo tal cosa o ¿quizás sí?Al principio me costó internarme en la historia urdida por Hawkins, aunque finalmente y, para mi sorpresa, me enganchó bastante. No me ha parecido una novela brillante, pero alabo lo bien que se le ha dado crear suspense e intriga a partir de un argumento en apariencia plano y, hasta cierto punto, predecible. Es una historia oscura, retorcida y que toca el tema de la violencia hacia las mujeres, padecida durante milenios. Dada la fecha tenebrosa que se acerca, es una lectura muy apropiada para Halloween por sus alusiones a la caza de brujas británica y sus bárbaras técnicas.
Si la apresada se ahogaba, se demostraba que era inocente. Si sobrevivía bajo el agua, era una bruja auténtica
Se trata de una obra coral, son muchos los personajes que llevan la voz cantante y que tienen que aportar su particular visión de los hechos:Jules se nos presenta como una fracasada que nunca perdonó a su hermana por su cruel trato recibido por ella desde la infancia y por el modo que tuvo de traicionarla cuando más la necesitó. Ahora de adulta, arrastra aún mucho dolor y rencor, pero también amor hacia una hermana que ya no está.Nel, a la que no conocemos nunca en vida, sino a través del testimonio de aquellos que la conocieron y de sus propios escritos sobre la poza, se nos presenta como una mujer problemática, una mujer sin pareja fija, buena madre pero algo cabra loca y ajena al dolor que sus actos pueden ocasionar en otros. La percepción que tenemos de este personajes evoluciona a lo largo de la trama e iremos comprendiéndola cada vez mejor.Lena, hija de Nel y sobrina de Jules, es una joven de quince muy guapa, bastante deslenguada que está triste y enfadada por lo que ha ocurrido. Lo que nadie sabe es que guarda un terrible secreto sobre la muerte de su mejor amiga, Katie, que meses atrás también se ahogó en la poza.Sean, el sheriff del pueblo a cargo de la investigación de la muerte de Nel, está casado con la directora del colegio del pueblo y es hijo de Patrick, el anterior sheriff. Cuando era un niño, su madre también se suicidó en la poza, así que el asunto le toca muy de cerca.Juicios de Salem, en honor a la excéntrica de Nickie
Nickie la chalada/vidente del pueblo que aborda, en más de una ocasión, al resto de personajes insinuándoles que lo de la poza no son suicidios. Afirma que lo sabe por su hermana muerta Jeannie, quien trabajó en la policía con Patrick, padre del actual sheriff.Mark es el profesor de Lena y Katie, quien tiene unas sospechosas ganas de irse de viaje de forma apresurada.Y aún quedarían por presentar a Louise, su hijo pequeño y a la nueva agente de policía Erin, quienes también tendrán mucho que aportar, aunque en menor medida que el resto.Los capítulos son cortos, lo cual dota a la novela de mucho ritmo y hace que el interés no decaiga. Aunque al principio, esto puede resultar algo lioso. Cada capítulo, además, está narrado por un personaje diferente, bien en primera o en tercera persona. Así, poco a poco, con lo que averiguamos de cada uno vamos uniendo las piezas del puzle y comprendiendo lo que ocurrió realmente aquella fatídica noche en el Nel se precipitó desde las alturas a las frías y traicioneras aguas de la poza. Sin embargo, la autora juega con nosotros al despiste y se guardará un par de ases bajo la manga para el final. Dicho final puede resultar predecible pero, incluso entonces, se producen pequeños giros de los acontecimientos que sorprenderán al lector.Argumento: Pocos días antes de morir, Nel Abbott estuvo llamando a su hermana, pero Jules no cogió el teléfono, ignoró sus súplicas de ayuda. Ahora Nel está muerta. Dicen que saltó al río. Y Jules se ve arrastrada al pequeño pueblo de los veranos de su infancia, un lugar del que creía haber escapado, para cuidar de la adolescente que su hermana deja atrás. Pero Jules tiene miedo. Mucho miedo. Miedo al agua, miedo de sus recuerdos enterrados largo tiempo atrás, y miedo, sobre todo, de su certeza de que Nel nunca habría saltado…No te fíes nunca de una superficie en calma, no sabes lo que puede haber debajo.COMPRAR