Para conseguir "una escucha atenta", recomiendan repetir (a modo de reflexión) lo que te acaban de decir. Esto ayudará a centrarte en el punto de vista de tu interlocutor y redundará en una mayor capacidad de compresión y empatía. Para lograr esto, también es prudente evitar la tentación de contestar llamadas, mensajes de texto o correos electrónicos mientras la otra persona está hablando.
Sobre el bienestar y la empatía...
La próxima vez que converses con alguien (sea amiga, pareja o familiar), intenta practicar la "escucha atenta". Presta atención a lo quue están diciendo, sin dejarte llevar por tus opiniones sobre el asunto en cuestión. Si lo haces es probable que descubras que atender a la otra persona sin tener la tentación de intervenir no resulta tan sencillo como parece.
Para conseguir "una escucha atenta", recomiendan repetir (a modo de reflexión) lo que te acaban de decir. Esto ayudará a centrarte en el punto de vista de tu interlocutor y redundará en una mayor capacidad de compresión y empatía. Para lograr esto, también es prudente evitar la tentación de contestar llamadas, mensajes de texto o correos electrónicos mientras la otra persona está hablando.
Para conseguir "una escucha atenta", recomiendan repetir (a modo de reflexión) lo que te acaban de decir. Esto ayudará a centrarte en el punto de vista de tu interlocutor y redundará en una mayor capacidad de compresión y empatía. Para lograr esto, también es prudente evitar la tentación de contestar llamadas, mensajes de texto o correos electrónicos mientras la otra persona está hablando.