Ese fracaso llamado Europa

Publicado el 01 julio 2015 por Lulesi

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Unos vulgares mercaderes llevan medio siglo asociando las ideas “Europa” y “progreso”. Nada más antagónico.  Europa no es una unión de estados, naciones, pueblos o economías. Europa es una asociación de fracasados, tras dos guerras mundiales, que unos no supieron ganar y otros no supieron perder.

Hay una literatura, como casi todas fantásticas, que nos quiere vender la burra de Europa como un sumun de libertades, democracias y respetos a la verdad y a las personas.

La Europa real, la que palpamos día a día, es un instrumento captado por el capitalismo internacional que vende tres mercancías averiadas: la ley de los mercados, la austeridad como dogma y receta y la democracia de los fuertes o garrotazo al débil.

No dan para más.  Su “fuerte” economía es una entelequia, subordinada a USA y a China, su autonomía es la que dicta los bancos de Alemania y el FMI. Y sus capacidades inventivas, de negociación y de respeto a los pueblos y a los personas, el cero absoluto.

Como todo ser que nace y crece, en su corta existencia, no ha tenido, ni tiene capacidad de respuesta ante problemas como la inmigración exterior y la deuda de sus países más afectados por una crisis, tan injusta como artificial, de la economía mundial.

A los inmigrantes los reciben a pelotazos o los dejan morir en el mar en infames pateras.  Ni la menor respuesta inteligente y basada en conceptos de humanidad. A las deudas de sus países menos favorecidos igual: les aplican medidas de recesión y austeridad y la deuda no hace sino crecer.  Sus capacidades para abordar, diagnosticar y curar un problema son nulos. Y lo llevan demostrando ya en casi una década.

Con gobernantes de la capacidad de los que conocemos, tocadas sus alas en la mayoría de los casos por el plomo de la corrupción hay muy poco que esperar. Sanciones, recortes, restricción de derechos sociales, retórica feudal e ineficacia.

¿Adónde vamos con Juncker, Draghi, Merkel o Rajoy? Al más absoluto caos. Son tan inútiles como parecen, ayudando a las multinacionales a evadir impuestos en Luxemburgo, hundiendo a Lehman Brothers y falsificando la deuda griega o duplicando la deuda neta del Estado Español.

Nada de la Europa de los Pueblos y la Europa de las libertades. La Europa de los mercachifles, del soborno y la dieta y la donación interesada de los banqueros.  Dice la mitología que Zeus, disfrazado de toro blanco, raptó a Europa, hija del rey Agenor, cuando tomaba el sol en una playa. Yo creo que todavía no la ha devuelto.

Dentro de poco se puede dar la paradoja de que todos seamos, a la vez, víctimas y verdugos, y eso aparte de significar el Estado General de la Corrupción, conllevaría a que tendríamos que soportar, de por vida, a Aznar riéndose y a Rajoy leyendo el Marca.


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