El esmalte que hoy os presento es un producto que parece inventado por el mismísimo diable
Se trata de esmaltes térmicos, que son esmaltes que reaccionan a la temperatura y gracias a unas partículas que llevan en su fórmula, cambia de color al cambiar la temperatura ambiente y la temperatura de la persona que los lleva. ¿raro verdad? Y poco útil, pensaréis
De momento creo que solo existen en una marca de esmaltes de origen ruso que no se vende en España (si alguien los ha visto en algún lugar o conoce algun distribuidor, que nos lo haga saber!). La marca se llama Dance Legend y por lo que he visto en internet, se trata efectivamente de una marca muy popular en Rusia que tiene una amplia gama de esmaltes y es muy usada en los centros de estética de ese país. Por tanto, los esmaltes térmicos son una gama más de las que esta marca ofrece. Yo los pude probar en el centro de estética Divina Vanidad, donde hacen manicura con estos esmaltes si lo deseas. Además, como tienen unas manicuristas profesionales muy saladas, me hicieron unos detalles de nail art que me enamoraron! Mirad qué cosa más bonita me hicieron para combinar con el tono rosado-lila del esmalte magnético que probé.
Como lo probé en pleno verano (hace unas semanas) hacía mucho calor en la calle así que al aplicarlo, el esmalte se mantuvo en un tono rosado algo metálico muy bonito pero no pude ver mucho cambio. Cuando llegué a casa y reanudé mi vida normal (después de ser mimada en Divina Vanidad) empecé a experimentar los cambios térmicos. Por ejemplo, cuando estaba en una habitación con aire acondicionado el esmalte se oscurecía ligeramente al estar en un entorno más fresquito pero sobretodo note los cambios cuando tocaba cosas frías y los dedos se enfríaban mucho. Por ejemplo si manipulaba hielo, cogía una botella de la nevera o bebía de una lata de Coca-Cola muy fría: en esos casos, el esmalte se tornaba morado!! Muy curioso! Me hice estas fotos con los cambios para que lo vieráis!
La manicura me quedó preciosa como veis y el efecto del esmalte es realmente muy curioso. Pero hay un gran pero…. la calidad del esmalte…. 48 horas después de hacerme la manicura el esmalte empezó a saltar de las uñas como si fuera una pegatina, se despegaba totalmente de la uña dejando unos desconchones tremendos. Hacia mucho que no me pasaba con ningún esmalte, la verdad…. Así que me parece un efecto divertido y que merece la pena probar para un evento especial o como curiosidad, pero no me compraría un esmalte de uñas ni me haría la manicura habitualmente con ellos porque no tiene una duración ni siquiera aceptable.
He encontrado una tienda web rusa donde se pueden comprar estos esmaltes, y además he visto que tienen mucha variedad de tonos de los esmaltes Thermovarnish. Cuestan $9,15 cada uno, por si alguna quiere probarlos….
¿Qué os parece el efecto? ¿Habíais oído hablar de ellos o los habéis probado alguna vez?
¡Gracias por leer y comentar!