Un frío día de Diciembre, dos amigos, Aurelio y Nelson, decidieron volver a verse después de muchos años. Nelson decidió irse a estudiar al extranjero, a Alemania, ingeniería industrial, debido a la falta de oportunidades en España. Nelson le estuvo contando a Aurelio que eligió esa carrera por recomendación de su padre, que también es ingeniero industrial, ya que no estaba seguro de que quería estudiar.
En cambio Aurelio decidió quedarse en España y estudiar aquello que realmente le gustaba desde hace varios años, Ciencias Políticas. Aurelio, al contrario que Nelson, es un chico más introvertido, que prefiere escuchar antes que hablar.
Quedaron antes de comer en Sol, la céntrica plaza de Madrid, aprovechando que Nelson estaba de visita y hacía tiempo que no paseaba por el centro de Madrid. Nelson le estuvo contando a Aurelio cómo es su vida en Alemania, es muy diferente a cuando estaba en España, pero tampoco le desagrada. Aunque sin duda espera volver algún día.
La conversación fluía tranquilamente hasta que Nelson le preguntó: “–¿Por qué decidiste estudiar Ciencias Políticas?– con una cara de incredulidad, –tiene que ser aburridísimo.”
“–Porque es lo que realmente me gusta, me ayuda a entender el mundo en el que vivimos y a cómo poder transformarlo–le respondió Aurelio, –lo decidí por vocación, no por dinero. Además prácticamente todo lo que te rodea está relacionado con la política.”
“–Anda, anda, que exagerado, si fuese así algo sabría de política, pero apenas me entero– le replicó Nelson, –es imposible que seas así.”
“–Verás que hoy te logró demostrar que sí es así.– respondió Aurelio.”
Estuvieron andando por Gran Vía, donde apenas pudieron hablar debido a la cantidad de personas que caminaban por la estrecha acera y el ruido de los coches frenando y acelerando constantemente debido a lo semáforos. Hasta que llegaron a un McDonalds y decidieron entrar a comer, Aurelio sabía que aquí podría comenzar a convencer a Nelson de que la política le rodea. Cada uno eligió un menú Big Mac y se sentaron a comer, mientras Aurelio le contaba cómo era su vida en Madrid después de que algunos amigos se fueran a estudiar en el extranjero, Nelson comenzó a mirar los embalajes de la hamburguesa, las patatas, la bebida y la otra hamburguesa extra que se pidió, calculó y se dió cuenta de que superaba con creces las mil calorías.
“–¿Te has dado cuenta qué solo en esta comida superamos las mil calorías?–le preguntó Nelson.”
Aurelio no pudo evitar sonreír, no era una sonrisa entera, sino media sonrisa, lo suficiente para que Nelson se diese cuenta y frunció el ceño. Entonces Aurelio le respondió: “Eso es más o menos un tercio de lo que debemos comer cada día, imagina. Por lo menos desde hace dos años en Estados Unidos tienen que exponer las calorías de cada producto.”
“–Aquí deberían hacer lo mismo– dijo Nelson, –seguro que casi nadie sabe cuantas calorias se esta comiendo.” Aurelio se rió y volvió a sonreír con su típica media sonrisa. “Eso, mi buen amigo, es política.–le respondió Aurelio.”
Ambos amigos dejaron el McDonalds para seguir caminando e ir contando sus anécdotas durante su nueva vida universitaria. Fiestas, chicas y amigos coparon la mayor parte de la conversación, hasta que llegaron al Metro para ir a la Universidad de Aurelio, que se la quería enseñar a Nelson.
Nelson se sorprendió con el precio del metro, ya que él llevaba dos años estudiando en el extranjero y no apreció hasta hoy la subida de precio del billete.
“–¡Madre mía, como sube el precio del metro!– exclamó Nelson. Aurelio volvió a reírse cómo en el McDonalds y volvió a decirle: –“Ay, mi buen amigo, eso es política. ¿Quién crees que gestiona el Metro, un medio de transporte público?”
“–Vale, admito que eso tiene lógica, pero por ejemplo el precio de los libros o de las entradas para el cine no lo puede controlar el gobierno.
“–Claro que puede, acaso no puede subir o bajar el IVA sobre la cultura o ayudar con subvenciones a las pequeñas librerías o cines para evitar que desaparezcan, le contesto Aurelio. Cómo puedes ver, prácticamente todo lo que te rodea está relacionado con la política.”
Continuará…