José María Sánchez Verdú (1968): GRAMMA. Jardines de la escritura
ópera con libreto de J. M. Sánchez Verdú
Simone Stock, soprano (Venus, Sirena)
Daniel Johanssen, tenor (Ulises, Adonis, Monje 1)
Howard Quilla Croft, barítono (Tamos, Monje 2, Dante)
Tom Sol, barítono y narrador (Tot, San Agustín, Hugo de San Víctor)
Márta Rózsa, mezzosoprano; Koichi Yoshitomi, tenor; Lisandro Abadie, barítono y Auke Kempkes, bajo (coro)
Orquesta Sinfónica de Lucerna
Director: Rüdiger Bohn
1. Introducción
2. I. Thamos y Tot
3. II. La flor del loto
4. III. Arquitecturas de la memoria
5. IV. Jardines de Adonis
6. V. El silencio de la escritura
7. VI. Libro de los jardines de la escritura
----------
ANEMOS C33006 (Diverdi) [52'26'']
Grabación: Mayo de 2006
Pese a que muchos le niegan a propuestas como ésta (o como al mismo El Viaje a Simorgh que se estrenó en el Teatro Real en 2007) su carácter de ópera, lo cierto es que yo prefiero ampliar los perfiles del género dramático para acoger en su seno a una obra como Gramma, que sin duda los desborda, como bien dice Álvaro Guibert en sus notas a este disco. Y continúa Guibert con una descripción del espectáculo: "La puesta en escena de la directora Sabrina Hölzer y Mirella Wingarten define un espacio teatral nuevo. No hay escenario, todo es sala, o viceversa. El espectador se ve sentado ante un pupitre individual, con un libro blanco cerrado, unas instrucciones y un flexo encendido. A uno y otro lado, más pupitres con más espectadores. Encima, una rejilla metálica, y sobre ella, cual Marilyn sobre el metro de Nueva York, la orquesta y los cantantes. Delante, un púlpito para el director/lector. El sonido nos cae de arriba y delante no tenemos nada a lo que mirar. La situación se vuelve operística (o sea, teatral) cuando abrimos el libro, cuyas letras, ilustraciones y texturas constituyen la escena y efectúan la acción dramática. Los espectadores pasan las páginas (o sea, cambian de cuadro) todos a la vez".
Como siempre en Sánchez Verdú, esta Gramma aspira a moverse en terrenos fronterizos, tanto en el mundo de las artes (la música, la pintura, la literatura, la caligrafía incluso) como en el de las culturas, con referencias al mundo egipcio, a la Grecia clásica, a la patrística cristiana y a los ambientes monacales, siempre en torno a un tema que es también recurrente en el músico algecireño, el de la memoria (y, en consecuencia, el del olvido), que aquí se vincula directamente a la escritura. Y como siempre en Sánchez Verdú, la música está cargada de sugerencias, de la fascinación por la tímbrica y el trabajo detalladísimo sobre las variadísimas texturas, del uso heterodoxo de los instrumentos orquestales, que se asocian por grupos camerísticos. El canto está tratado de forma diversa, sin que falte el arrebato lírico (por ejemplo, el lamento de Venus en "Jardines de Adonis"), aunque hay susurros, silencios, descomposiciones silábicas y hasta fonéticas de los textos y una riqueza de recursos que se han hecho ya habituales en otros creadores de nuestro tiempo enfrentados al hecho operístico (pienso en Lachenmann y su La pequeña cerillera, obra provocadora donde las haya). El resultado es una colección de discontinuidades sonoras agrupadas por escenas con un considerable y refinadísimo poder poético.
Tras una introducción instrumental, Gramma se divide en seis escenas:
I. Tamos y Tot. El dios Tot muestra al rey egipcio Tamos su último invento, la escritura, que hará más sabio a su pueblo. Tamos piensa lo contrario, pues la escritura les hará fiarse de los signos y abandonar la memoria. La leyenda la cuenta Platón en su Fedro y Sánchez Verdú trae de ella apenas retazos: Tot pronuncia tres palabras y el rey, solo una.
II. La flor del loto. La Odisea. Ulises, la isla de los lotófagos y las sirenas. Otra vez, la memoria y el olvido. Pero en toda la escena no se pronuncia una sola palabra inteligible.
III. Arquitecturas de la memoria. San Agustín lee (en alemán y en latín) párrafos de los capítulos 16 y 17 de sus Confesiones, allí donde aparece de nuevo tratada la memoria.
IV. Jardines de Adonis. Adonis agoniza herido por un jabalí y Venus canta su lamento, extraído de Ovidio.
V. El silencio de la escritura. Hugo de San Víctor dicta pasajes de su principal obra, el Didascalion, y del Evangelio de San Juan. Los monjes copian. Bisbiseos y silencios.
VI. Libro de los jardines de la escritura. El Paraíso de Dante. Todo se llena de luz. "'Oh, luz eterna, que sola en ti te inflamas, sola te entiendes, y por ti entendida y entendedora, te complaces y amas!"
Estrenada en Múnich en mayo de 2006, Gramma está inédita en España.
Sánchez Verdú: "El silencio de la escritura" de Gramma. [5'08''] Solistas. Orquesta Sinfónica de Lucerna. Rüdiger Bohn
1 - 2 - 3 - 4 - 5 - 6
Wikio