Se han reunido los rectores de las universidades públicas de España y después de mucho pensar durante varios días han hecho participes al resto del país de su conclusión “España esta perdiendo el conocimiento”, pero están muy equivocados, España está en coma, y debo entender que se quejan porque hay menos dinero para la investigación. Pero vamos a ser sensatos, España es el mayor criadero de borricos del mundo amparado por las leyes de la educación vigente que permiten a un zoquete terminar la carrera con algún suspenso de primaria, unos cuantos de secundaria, unos cuantos más de la ESO y otras cuantas mÁs de lo aquello, pero que esperaban? eminencias o tarugos?.
En este país no vamos a inventar la pólvora y efectivamente hay gente muy preparada pero como no se merecen trabajar en las condiciones que les ofrece este país se van a instituciones extranjeras donde sí se les reconoce su valía y aquí sigue vigente la frase de Miguel de Unamuno de ¡Que inventen ellos!.
A nuestra juvetud les cuesta expresarse por falta de vocabulario, leen a duras penas, escriben peor que leen, de matemáticas andamos jodidos y en ciencias empatamos con Somalia y Nicaragua, ahí están las estadísticas, y esto es el fruto de querer hacer de la educacióon un libertinaje.
Hay que cambiar la estructura de la educación desde los niveles mas bajos, exigir responsabilidades tanto a los estudiantes como al profesorado, que muchas veces tienen tanta culpa como los alumnos, crear una educación basada en el conocimiento y no en los ideales políticos del momento, olvidarnos de adoctrinar y recuperar tanto la educación instructiva como la educacion moral que tambien se ha perdido hace tiempo.
Estos rectores deberían preocuparse más por dar una buena educación en sus aulas y pensar menos en la salud del país para poder recuperar ese conocimiento al que ellos han contribuído a perder con su dejadez, la mayoría de los premios Nobel de este país en cualquiera de sus categorías no han recibido ni de la décima parte de las ayudas que reciben muchos de los burros que cada año se licencian con diez suspensos.
Señores rectores, ustedes dirigen universidades subvencionadas con dinero público, hagan lo mismo que hace cada familia de este país, apretense el cinturón, no dilapiden el dinero que no es suyo y devuélvanles a las universidades españolas el nivel que nunca debieron perder, en parte por su culpa.
Y tú que vas a ser de mayor ...