España: Seis poemas para hablar de un futuro en crisis

Publicado el 18 diciembre 2011 por Bonhamled

La crisis, la conocida, archisabida, manida y presumida crisis parece que se saldará, porque las crisis siempre se saldan nunca son apocalipsis, con reducción del estado social hasta lo que podamos mantener, el que los mercados digan que debemos tener o quizás el señor Sarkozy y la señora Merkel dictaminen que tenemos que tener para mantener una Unión Europea donde no tengan que poner dinero otra vez.También vendrá la reducción de los derechos laborales como un paradigma eterno, un vellocino de oro, una piedra filosofal que convertirá los cinco millones de parados en provectos empleados sin descanso y con productividad de trabajadores chinos. Para ello tenemos los grandes impulsores, los mercados, que nos dará ese maná caído del cielo que se come con el pan de los créditos que no se liberan porque los estados no son confiables para los propios mercados. Como adarga en astillero, defensa y espolón de ataque, en esta España de charanga y pandereta, cerrado y sacristía, están los empresarios, los emprendedores, los que habrán de crear esos empleos en la tierra fértil y regada de todos los pronunciamientos favorables y todas las condiciones firmadas y sancionadas.En este ilusionante y plomizo horizonte me atrevo a recordar seis poemas, todos conocidos. Seis solo, o quizás decir seis, tantos como seis. Pensando que la poesía, mezclada con los políticos y los dineros quedará encima como el aceite y el agua y nos dará alguna idea aprovechable en su conjunto.Traigo un primerísimo poema - enunciador- de Francisco de Quevedo llamado "Miré los muros". Un verdaderamente primero, para lo que quiero contar, de Mario Benedetti denominado "De que se rie", después dos de Gabriel Celaya, uno conocido como "España en marcha" y otro "A Andrés Basterra", uno de regalo que haría el sexto de Eduardo Galeano que se dice "Los nadie" y por último uno de Antonio Machado "Españolito que vienes al mundo" que es un canto a la desesperanza.Es quizás una logomaquia en forma de poemas de escritores de talento que me dice de lo que tenemos y nos espera: Unos muros de la patria ciertamente vencidos por la ingratitud y nesciencia de gobernantes y políticos legos y alejados, por los especuladores egoístas e internacionales y por el egoísmo de cabeza y corazón de ladrillo de un mundo de ladrillo que nos dejó deudas de abismo. Luego, la duda, la queja, el enfado frente a esos personeros, esos importantes que nos dejan en nuestra pequeña y gran pena y penuria mientras ríen, prediciendo desastres, o lloran, prediciendo catástrofes. El tercer poema es la arquitectura básica de confianza en un pueblo, una ciudadanía siempre muy por encima de sus gobernantes, sus empresarios, sus periodistas, sus jueces, unas personas trabajadoras, valientes y sin miedo al futuro. Un siguiente poema que me recuerda quienes somos, los que trabajadores, los que producimos y soportamos la mirada del que debe dirigirnos, regir nuestro futuro y nos ha defraudado hasta hacernos creer que somos nadie, el penúltimo poema, para desembocar en la desesperanza de decir si estuviéramos solo un poco más unidos quizás el Leviathan de la crisis nos hubiera hecho menos daño.Probablemente podrán surgir diez o quince poemas más que sigan esta línea de pensamiento, pero estos fundamentalmente me dejan expresar en palabras mejores que la mía el sentimiento de esta primera parte de la parte central de la salida de la crisis. Donde ya el planteamiento del cuento se ha consolidado, el nudo está más anudado que el de los bueyes de Gordias y afrontamos el desenlace con miedo, sorpresa y esperanza.Personas, países, esperanzas, personas. Recuerdos del día de mañana.
Tomo algo de cada uno:
Miré los muros de la patria mía, si un tiempo fuertes ya desmoronados de la carrera de la edad cansados por quien caduca ya su valentía.
seré curioso señor ministro de qué se ríe de qué se ríeEspañoles con futuro y españoles que, por serlo, aunque encarnan lo pasado no pueden darlo por bueno.Te he visto en mis talleres, día a día, durando, y nunca he distinguido si estabas triste, alegre, cansado, indiferente, nostálgico o borracho.

Los nadies: los hijos de nadie, los dueños de nada.

Los nadies: los ningunos, los ninguneados, corriendo la

Liebre, muriendo la vida, jodidos, rejodidos

Españolito que vienes al mundo te guarde Dios. una de las dos Españas ha de helarte el corazón

Poesía en Recuerdos del día de mañana.Imagen: http://javierescritor.blogspot.com/2011/03/visiones-del-futuro.htmlDespierte el alma dormida, avive el seso e despierte. A fin de cuenta sino pensamos y vivimos para que queremos estar. Los pensamientos de hoy son recuerdos del mañana que tenemos hoy.