Y así, dados los ingredientes surrealistas, y realizado el choque, la afición del equipo ganadordel encuentro se independizaría de laotra por unas horas, como si de una película se tratara. ¿Y la otra? ¿se quedaría en el campo? ¡pues claro que no! ¡a bailar todos, joder!
Por otro lado, las autoridades del palco, Rajoy, Aguirre, Gallardón, Mas, Puig, Pujol, etc., podrían irse a cenar, juntitos, como de costumbre, y debatir sobre el partido de fútbol; así estarían distraídos y se relajarían con los “recortes”. Pero bueno, me estoy yendo de tema. La foto, real, seguro que es fruto de algún vándalo; los vándalos son algunos tipos y tipas que se van a cenar y después de tomarse cuatro copas, suelen maquinar pillerías y atropellos de toda clase, que acabamos pagando todos, españoles y catalanes.(El periodista que susurraba a los burritos)