Con vistas al Township...
Para quienes no lo sepan o no lo tengan presente, Sudáfrica fue regida hasta el año 1994 con lo que se denominó Apartheid, básicamente un proceso social sistemático de segregación racial de los cuales dejamos todos los horrorosos detalles en el link.
Esta realidad, si bien fue abolida en la fecha expuesta anteriormente, es un proceso que dejó secuelas aún muy tangibles, perceptibles en infinitos focos de información fácilmente decodificables para un ojo medianamente observador.
Uno de estos llamativos hechos es la separación que aún se expresa en términos geográficos y espaciales en casi la totalidad de las ciudades sudafricanas, lugares en donde se puede comprobar en doce minutos, que los blancos viven apartados de los negros, indios y viceversa.

Qué gente linda!...

Dos Capos dos...

Posando pa' la foto...
Alrededor, o a una mínima distancia de cualquier centro de cualquier ciudad en Sudáfrica, se encuentran los famosos Township (de los cuales también dejamos un link, lamentablemente en inglés, para aquellos que quieran investigar un poquito más a fondo), asentamientos reservados en épocas del Apartheid para toda persona que no pertenezca a la “honorable y superior” raza blanca. Generalmente los township absorben poblaciones que superan ampliamente a las de la ciudad en sí, y en el caso de Grahamstown, albergan algo así como el 80% de las almas que la habitan.
Muchos blancos no pisan bajo ningún concepto estos llamativos asentamientos porque todavía viven con el miedo de que se los coman, cosa que muy lejos de ser una posibilidad, es un delirio de cola de paja sexual reprimida; y muchos otros, que realmente no son racistas, porque no tienen demasiadas motivaciones para hacer un tour por un lugar que no hace a ninguno de los aspectos de su cotidianeidad... (y que el gobierno se sigue encargando efectivamente de que no los haya).

Toda la onda...

Haciendo el trabajo duro...

Modelos Grahamstown 2012...

El taller...
Como nosotros somos dos sudacas a la deriva no tenemos nada de todos los preconceptos que tienen algunos de estos típicos sudafricanos (que por suerte no van quedando tantos), y como además contamos con una curiosidad a prueba de bombas atómicas, nos lanzamos en varias oportunidades en caminatas hacia la particular hermosura y tranquilidad que se respira en estos asentamientos, en las cuales tuvimos una vez más el honor de comprobar la calidez humana que transmiten nuestros amados negros sudafricanos... su soltura, su sorpresa al vernos y su extremo y bondadoso recibimiento.
No queríamos que falte un recorrido fotográfico por estos maravillosos lugares que en definitiva son el corazón del espíritu de Sudáfrica. Entonces los dejamos con nuestro Apartheidfotográfico, que no es definido por motivos raciales, sino por contenido temático y geográfico...

¿Sale un partidito muchachos?...

Las casitas del barrio alto...

¿Qué pasa por la calle?...
Con ustedes entonces: la elegancia y la impostura del famoso township, lugar al que todavía muchos sudafricanos no se atreven a pisar en este maravilloso y contradictorio país...Hasta la próxima y última entrega de nuestro recorrido fotográfico por Grahamstown...

Fingo extensión...
Volviendo al town, por las vias del tren... |

El típico jueguito de equilibrio...
Una pequeña parade por las calles del township...
Publicado por Pablo Zapata y Julian Arenzon