Las 6 nominaciones de la película del director de Domingo Sangriento o United 93 vienen a confirmar que Paul Greengrass se mueve como pez en el agua filmando estas historias, basadas en hechos reales, en las que gente corriente tiene que sacar lo mejor de si mismos para enfrentarse a hechos que superarían a cualquiera. Capítulo aparte merece la interpretación de Tom Hanks, que está enorme como protagonista casi absoluto. Tengo que reconocer que Tom Hanks nunca ha sido santo de mi devoción y suelo ser bastante severa con sus interpretaciones pero en, este caso, le doy un sobresaliente. Por ello, y a falta de ver American Hustle en los próximos días y ver como está en ella Christian Bale, me parece un escándalo que hayan dejado fuera de la lista de nominados a este hombre. En contraposición a Tom Hanks, tenemos a Barkhad Abdi, flamante ganador de un BAFTA, quien si que ha visto premiada su actuación con una nominación en los Oscar. En este caso, esta interpretación no me ha parecido nada del otro mundo, creo que Hanks se lo come con patatas en cada escena que comparten y no lo veo con posibilidades de llevarse una estatuilla dorada la semana que viene pero tampoco creía que le iban a dar un BAFTA, así que..
Hay películas que tocan el corazón y, sin duda, Her es una de ellas. A priori habrá quien se tome la historia a cachondeo porque eso de que un hombre se enamore de un sistema operativo parece de chiste o, incluso, pueda parecer algo obsceno, pero cuando conoces a Theodore (Joaquin Phoenix) y escuchas por primera vez a Samantha (Scarlett Johansson) te das cuenta de que no hay nada de eso. Es amor de verdad, amor como el que pueda experimentar cualquiera con una persona de carne y hueso, ya que entre ellos se establece una relación en toda regla, con sus altos y sus bajos. Es una historia de amor que me resulta paradójica en el sentido de que es la ciencia ficción más real que he visto en la vida. Es a la vez tan tierna como triste. Tierna, porque, a pesar de todo, aun queda sitio para establecer una relación tan íntima, aunque sea entre un ser humano y un ser virtual y triste porque la película me parece un reflejo de un mundo que se está deshumanizando de manera que una relación de estas características podría ser real (de ahí lo de la paradoja entre ciencia ficción y realidad). Reconozco que Her me está dando bastante que pensar y, por ahora, el poso es bastante amargo pero es una gran película que no puedo dejar de recomendar.PD: la he visto en VOS porque creo que no tiene sentido verla doblada. No voy a opinar sobre si doblaje sí o no, pero creo que esta película no debería exhibirse doblada porque desde el momento en que no se oye la voz de Scarlett Johansson, la película no puede ser la misma.PD2: todo lo que no sea que Spike Jonze se lleve el Oscar al mejor guión original sería un escándalo. Ahí lo dejo.
Cuando alguien decide rodar una película sobre un tema tan controvertido como el de los niños robados tiene dos opciones, o buscar la lágrima fácil o contar la historia sin esconder los hechos pero sin recrearse en ellos. Y esto último es lo que he encontrado en Philomena. Yo estoy especialmente sensibilizada con el tema de los niños robados, no por nada en concreto, simplemente porque me parece un asunto terroríficamente cruel y, si el proyecto no hubiera estado en manos de Stephen Frears, es posible que me lo hubiera pensado dos veces antes de ver la película. Pero la realidad es que, a pesar de la temática, la película es incluso optimista y en ello tiene mucho que ver Philomena (Judi Dench). Desconozco cuanto hay de la Philomena real en la de la película, pero a mi me ha parecido adorable en su simplicidad, en su fe y, sobre todo, en su bondad, una bondad tan grande que le impide odiar a quienes le robaron a su hijo y que le demuestra a Martin (Steve Coogan) el estirado periodista que le ayuda a buscar a su hijo, que, por mucha cultura y conocimientos que tengas, sino tienes inteligencia emocional, no tienes nada.No creo que vaya a ganar ningún premio la semana que viene, pero creo que Philomena es bastante recomendable y que algunos deberían aprender de esta película que no hace falta recurrir a los efectismos para contar historias dramáticas.