Especial "Viajando en el tiempo" . Primera parte

Publicado el 02 abril 2011 por Davicine
Uno de los sub-géneros más entretenidos de la ciencia ficción es la que podríamos llamar de "viajes en el tiempo". Aunque la más conocida referencia al género es la trilogía Regreso al Futuro, de Steven Spielberg, y, sin duda, una de las más conseguidas, a lo largo de este Especial, que os iremos ofreciendo cada sábado, os mostraremos una selección de películas ambientadas en viajes en el tiempo, escogidas por su fama, buena factura, originalidad, o argumento.
Intentaremos agruparlo por épocas, para mantener cierta coherencia cronológica, aunque dada la enorme cantidad de películas que manejamos, posiblemente tengamos que volver sobre nuestros pasos y retomar de nuevo alguna época.
Comenzaremos con una película muy discreta, que pasó casi desapercibida en su momento y que hoy en día apenas se recuerda: Navigator: Una odisea en el tiempo. Se trata de una producción neozelandesa, obra de Vincent Ward (que también participó en el guión) con un argumento muy original: En un pueblo de la edad media, en el norte de Europa, llegan rumores sobre la Peste Negra, y deciden peregrinar a la ciudad de la fran Catedral ( posiblemente Santiago ) para poner una cruz en su torre más alta. Pero, como está al otro extremo del mundo, deciden ir por debajo, excavando un tunel...a través del cual llegan a la Nueva Zelanda del s.XX. Es una obra original en su planteamiento y composición (en blanco y negro para la edad media, en color para la actual) con buen desarrollo durante casi toda la película, aunque llega un momento, cuando los protagonistas llevan un tiempo en el S.XX, que cansa un poco. Ganó el premio de cine fantástico de Sitges de 1988, y creo que, desde su modestia, es una obra muy conseguida.
En sentido contrario, nos encontramos Cruzada:Atrapado en el Pasado, del 2006. Adaptación de la novela de Thea Beckman, Cruzada en Jeans, título clásico (es de 1973) de la literatura juvenil, de la cual toma la idea general, y buena parte del desarrollo argumental, cambiando ligeramente las motivaciones y trasfondo del personaje. Como es lógico en muchas adaptaciones, se pierden bastantes detalles y precisiones que permitirían dotar a la película de mayor sentido, como por ejemplo, el tema del idioma. Sumado a un reparto desconocido y una ambientación no demasiado trabajada, hacen que la película haya pasado sin pena ni gloria. Es realmente una decepción, porque el original literario es una novela (juvenil) de primer orden, que ha acompañado a muchas generaciones de jóvenes desde 1973.
Para rematar esta primera entrega, mencionar la primera y original Un yanqui en la corte del rey Arturo, un musical protagonizado por Bing Crosby, acompañado por la belleza de turno, en este caso Rhonda Fleming. La película es de 1949 y no ha pasado a la historia del cine, oscurecida por su equivalente literario, y por un ritmo narrativo terriblemente aburrido, que hace que cualquiera de las secuelas que el tema ha originado sean más interesantes, especialmente la película con la que empezaremos la próxima entrega: Un astronauta en la corte del Rey Arturo.
Que aproveche
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