Cuando organicé esta escapada de otoño lo hice pensando justamente en ello, en alcanzar algunos destinos que aunque se encontraban relativamente cerca entre sí, siempre que los observemos desde el aire o desde un mapa, el trayecto por carretera implicaba tiempo. Hemos aprovechado los días al máximo, el tiempo nos ha sido favorable y las ganas no nos han faltado, así que hemos podido cumplir con los objetivos.
Para el último día completo de excursión habíamos dejado estos destinos realmente espectaculares. Si se va a pasar más tiempo en la zona podemos hacer una cada día, pero no se trata de excursiones largas ni excesivamente duras. Cada una de ellas nos lleva poco más de 2 horas, a lo sumo 3 horas si paramos a comer y a hacer fotos. Así que si el día acompaña no hay problemas para realizar las dos.
Las primeras horas de la mañana eran frías, una vez más nos encontrábamos los cristales del coche cubiertos con una fina capa de hielo, pero el cielo era azul y el sol brillaba anunciando otro día precioso en los alrededores de Ochagavía.
Nos dirigimos hacia el sur de Francia, región de Aquitania, también conocida como País Vasco-Francés. Atravesamos el zigzagueante Puerto de Larrau desde donde se observan unos paisajes maravillosos y donde salen a nuestro paso algunos caballos de la raza burguetana, por lo que mejor circular con precaución.
Una vez pasado Larrau, a 3 km. divisamos el albergue Logibar que está justo en la carretera, punto de referencia para la primera ruta. Poco antes está el desvío que nos llevará a la Pasarela de Holtzarte, pero ahí el parking es pequeño, así que seguimos por la carretera D-26 unos metros más hacia el aparcamiento que hay nada más pasar el albergue Logibar y que es mucho más grande y cómodo.
Comenzamos a avanzar por el camino que al principio no es complicado y transcurre a la sombra pero poco a poco comienza a subir y a ser soleado. Es la única dificultad del recorrido hasta la pasarela, que va en contínuo ascenso y, a veces, hay rocas que pueden hacer algo más complicado el trayecto. También hay que extremar el cuidado si ha llovido y el terreno está mojado.
Una vez superado este trozo, la parte final hasta llegar a la pasarela es más llevadera, pero el sol sigue impactando así que recomiendo llevar todo tipo de protección y agua. Hay un momento en que ya se divisa la pasarela, majestuosa, y se puede apreciar su tamaño, 70 metros de longitud, a una altura de unos 200 metros sobre las Gargantas de Holtzarte. Las vistas resultan tan maravillosas como impresionantes.
Llegamos hasta la pasarela y la atravesamos, si se sufre de vértigo el movimiento que se genera o el que generan los senderistas "graciosos" puede molestar y habría que abstenerse de cruzarla. Personalmente me encantó estar allí suspendida y admirando las inolvidables vistas que se pueden contemplar en los 360º de visión.
El recorrido de ida y vuelta no alcanza los 5 km. y nos llevará algo menos de 2 horas, dependiendo del tiempo que nos detengamos en la pasarela, aunque se puede continuar el camino una vez la atravesamos. Nosotros sólo llegamos hasta allí y regresamos sobre nuestros pasos hasta el aparcamiento, teníamos pendiente la segunda ruta del día.
Cuando llegamos a donde tenemos aparcado el coche es casi mediodía. Las Gargantas de Kakueta se encuentran a unos 20 km. de donde estamos, en dirección Tardets, así que hasta allí nos encaminamos.
Las Gargantas de Kakueta, a poco más de 2 km. de la comuna de Sainte-Engrâce, conforman un espacio protegido considerado uno de los más espectaculares de Europa. Estas gargantas se han ido esculpiendo a lo largo de miles de años debido a la erosión que provocaban las aguas del deshielo de la última glaciación, hasta formar un cañon de 2 km. de longitud cuyas paredes verticales llegan a los 300 m. de altura casi impidiendo el paso del sol. Hay una zona conocida como "El gran estrecho" en que las paredes están separadas por apenas 3 metros.
En los alrededores de la entrada hay zonas de aparcamiento, perfectamente visibles, donde dejar el coche. Andamos un poquito siguiendo la dirección de la carretera para comprar los tickets de entrada en el Bar "La Cascade" y a partir de ahí seguimos el sendero que transcurre principalmente a la sombra de las hayas, avellanos, castaños y robles o de las paredes de las gargantas.
El camino se ensancha un poco y llegamos a las Cascadas de Kakueta, que se pueden atravesar tanto por su parte trasera, ya que hay una especie de cueva excavada en la roca, como por su parte delantera siguiendo el camino. A estas alturas el derroche de agua con que nos brinda la naturaleza me tiene fascinada.
Puede que parezca algo insistente con el tema de agua, pero con la sequía que sufrimos este año es todo un lujo poder disfrutar de escenarios como el de las Gargantas de Kakueta.
Es ya media tarde cuando llegamos al aparcamiento y emprendemos camino de vuelta. Son menos de 50 km. los que nos separan de Ochagavía, pero menudos 50 km. La carretera es sinuosa y estrecha y el puerto de Larrau también tiene su áquel, por no hablar de lo rápido y bien que saben conducir algunos cuando lo hacen invadiendo ambos carriles de la carretera. Así que preferimos que no nos alcance la noche y volvemos.
Al día siguiente es el día de vuelta y final de viaje. Nos levantamos y desayunamos tranquilamente, aprovechamos para hacer algunas compras gastronómicas para llevárnoslas como recuerdo de la escapada y partimos hacia Tudela.
Acabamos tomando unos pinchos en el Bar José Luis y ahora sí, volvemos a casa.
Otras crónicas de esta escapada:
- Escapada otoñal: País Vasco-Francés y Selva de Irati
- Roncesvalles y Saint-Jean Pied de Port, entre España y Francia
- Ochagavía: Ruta Circular por el Camino de Irati y la Ermita de Muskilda
- Sendeando por la Selva de Irati y Fábrica de Orbaitzeta
- Espectáculo de la Naturaleza: Pasarela de Holtzarte y Gargantas de Kakueta
Otros posts de excursiones otoñales por la zona:
- Ibones de Anayet en el Valle de Tena
- Canfranc, una Historia de Espías, Nazis y Oro
- San Juan de la Peña, un Monasterio en la Roca
- Los Lagos de Ayous - Ruta Circular
- Castillo de Loarre, en el Reino de los Cielos
- Lanuza, su Embalse y Hotel La Casueña
- Del Embalse de La Sarra al Ibón de Respomuso, en el Valle de Tena
- Descubriendo el Pirineo Bearnés, el Valle de Ossau
Bon Voyage!