Espejito, espejito…

Publicado el 24 julio 2015 por Lola Lemans @lemanslola

Las mejores conversaciones suceden en el grupo de Facebook Club Más Placer, Menos Dieta. Allí nos encontramos y compartimos nuestro diario, contamos lo que comimos, el ejercicio que hicimos, los mimos que nos dimos para cuidarnos. Algunos días más, y otros menos. Pero siempre nos inspiramos para seguir adelante y hacerlo cada día mejor.

Hace poco Mari nos decía “Estoy pasando unos días raros últimamente, empiezo comiendo bien y al final del día la fastidio. Me siento sola y triste y creo que cubro mi necesidad de compañía con comida. Me gustaría saber si a alguien más le pasa o ha pasado lo mismo alguna vez“.

Nos pasa a muchas, a mí me pasa. No siempre es soledad, muchas de nosotras tenemos marido, hijos, perros… hasta diría en mi caso es falta de soledad, ya quisiera yo muchas veces escaparme a una isla desierta aunque sólo fuera por un ratito. No siempre es tristeza, he tenido últimamente situaciones de estar pasándola genial con amigas, y por puro “celebrar” atacar desaforadamente las patatas fritas hasta terminar el maldito tubo de Pringles.

¿Qué será lo que nos lleva a autosabotearnos y no saber elegir qué comer y cuándo parar?

Luisa responde a Mari, y nos hace pensar “Todas estamos por lo mismo, conseguir un peso saludable, a mi no me gusta hablar de dieta porque parece que el cuerpo se pone en guardia. Y quiero proponernos algo, el ejercicio del espejo, que es mirarse en el espejo a los ojos y hablarnos y saludarnos con mucho amor. Muchas veces estamos desconectadas de nosotras, no dejemos de hacerlo todos los días al levantarnos, hasta conseguir hablarnos con amor naturalmente. Esto nos hace descubrir muchas cosas, por ejemplo el trato que nos damos, nos ayuda a tomar conciencia del diálogo interno que mantenemos con nosotras mismas.

¿Verdad que suena interesante? Luisa nos sigue contando “Yo lo estoy haciendo y los primeros días me costó un montón, me sentía ridícula hablando sola. Pero después al mirarme a los ojos y ver lo necesitada que estaba de cariño, de ternura, de amor, ya empecé a tratarme mejor, con más dulzura, después de llorar un montón. Este ejercicio hace sentir diferentes emociones de acuerdo a la necesidad de cada una“.

Me encanta la conclusión de Luisa: “Buscamos cambios externos y lo más importante comienza en nuestro interior, y cuando estamos bien con nosotras se ven los cambios y son duraderos“.

Muchísimas gracias Luisa por habernos recordado que necesitamos amarnos a nosotras mismas.

Debemos escoger qué vamos a comer, y en qué cantidad, desde el amor… ¡el amor propio!

Comencemos por amarnos a nosotras mismas, tierna y profundamente, como punto de partida para tomar decisiones que favorezcan nuestra salud y nuestro bienestar.

Luisa comparte nombre de pila con Louise Hay, la mujer que se considera una de las fundadoras del movimiento de auto ayuda, y a la que conocí en mi infancia a través del libro que leía mi tía “Usted Puede Sanar Su Vida”.

Louise Hay promueve el “mirror work“. Cuando le preguntaron en esta entrevista “cómo puede alguien comenzar a cambiar la forma en la que piensa”, Louise Hay respondió “Con el espejo. Creo que es de lo más poderoso, y funciona muy rápido. En una semana suceden grandes cambios. Mirándote al espejo, diciendo tu nombre, diciéndote ‘Te amo, realmente te amo’. Es un avance poderoso. Funciona como magia. Usa el espejo en vez de rechazarlo, o de decirte algo negativo sobre tu cuerpo y tu aspecto. Esas son afirmaciones terribles. Cada vez que te mires al espejo vas a temblar porque sabes que te darés un mensaje negativo. Así que si puedes cambiar esto, y hacer del espejo un amigo, y de la persona en el espejo tu amiga más querida, entonces las cosas cambian enormemente“.

Las dos Luisas me han convencido, y aquí estoy, dispuesta a probarlo todo con tal de poner un freno a mi addicción a las patatas fritas y las galletas de chocolate, con un par de acciones rápidas:

1) Pensamientos de amor cuando me mire al espejo, o cuando me mire en fotos: en vez de criticarme y buscarme los defectos, voy a sonreírme y a pensar que me quiero y me acepto tal cual soy.

2) Notitas post-it: Inspirada por la Operation Beautiful, voy a pegarme mensajitos que digan “Sonríe, eres hermosa“, o “Bombón, hoy te espera un día espectacular“.

3) En casos de emergencia, del tipo “ansiedad con probabilidades de atracón”, cuando me den ganas de abrir una bolsa de algo crujiente y grasoso, necesito detenerme, tomarme un momento de calma y pensar dos veces. Voy a mirarme a los ojos en el espejo y recordarme cuánto me amo, para determinar si realmente tengo hambre o es simplemente ansiedad.

Y te tengo una sorpresa… he preparado una meditación de tan solo 6 minutos para tener a mano en casos de emergencia, para tomarte un momento de calma y prevenir el atracón – espero que te sea de utilidad, yo ya la probe un par de veces y me ha servido.

Con un simple espejito como este, que llevo siempre en el bolso, he ido a encerrarme al baño de la oficina y puedo decir que exitosamente he cambiado las galletas por una barrita de cereal, una fruta, o hasta un gran vaso de agua.

Te la puedes descargar aquí: MeditacionEmergenciaAntiAtracones.mp3

Continuemos el diálogo aquí en los comentarios: ¿has probado declararte tu amor frente al espejo? ¿qué otras ideas se te ocurren para cultivar el quererte mas? ¿eres capaz de elegir qué comer, y cuánto comer, desde el amor y el respeto por tu cuerpo?

Y si no eres todavía miembro del grupo de Facebook, qué estás esperando para unirte al Club Más Placer, Menos Dieta.