Esperanza Aguirre ante la justicia por su huida de la policía

La presidenta del PP en Madrid deberá testificar por un presunto delito de desobediencia

ESPAÑA.- La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, está llamada a declarar este lunes 22 de septiembre a las 11 de la mañana hora local ante el juez Carlos Valle del Juzgado de Instrucción número 14, por el incidente de tráfico que tuvo la política el pasado 3 de abril en plena Gran Vía madrileña.
Aquel día, Aguirre detuvo su coche particular en el carril-bus para sacar dinero de un cajero automático y se marchó sin entregar la documentación requerida ni esperar a que los Agentes de Movilidad le entregaran la multa.
Según la narración de los agentes, la presidenta regional del Partido Popular dijo de manera muy despeptiva y con aires de superioridad “Venís a por mí porque soy famosa. Tenéis la placa. Denuncia al vehículo”, y acto seguido aceleró su vehículo y se dio a la fuga, chocando y derribando la moto de uno de los funcionarios. Comenzaba así una persecución de la policía local de Madrid hasta la vivienda de Aguirre, haciendo caso omiso de sus indicaciones de que parase el coche.
Al llegar a la casa, abrió el garaje sin bajar del vehículo y chocó contra el coche policial maniobrando para entrar en la casa.
La Audiencia Provincial de Madrid acordó el 5 de septiembre que los hechos se instruyeran como un presunto delito de desobediencia a los agentes (en base al artículo 556 del Código Penal) y no como una falta, como defendía el juez instructor y la Fiscalía.
El artículo 556 del Código Penal dice: "Los que, sin estar comprendidos en el artículo 550, resistieren a la autoridad o sus agentes, o los desobedecieren gravemente, en el ejercicio de sus funciones, serán castigados con la pena de prisión de seis meses a un año".
Así, la Audiencia Provincial estimaba, en parte, el recurso presentado por la acusación popular Transparencia y Justicia. Cuando conoció la noticia, Aguirre explicó, vía Twitter, que estaría «encantada» de ir a «contar al juez su versión» y que acudiría para contar «toda la verdad».
Ahora, Del Valle determinará si los hechos son constitutivos de alguna infracción penal y debe ir a juicio. La desobeciencia está castigada con una pena de entre seis meses y un año de prisión.
En el delito de resistencia o desobediencia grave a la autoridad o a sus agentes tipificado en el art. 556  del Código Pena, la acción típica consiste en resistir a la autoridad o sus agentes (resistencia pasiva), o desobedecerlos gravemente (necesidad de un mandato expreso, concreto y terminante; y necesidad de oposición manifiesta, reiterada, contumaz y recalcitrante) en el ejercicio de sus funciones.
Los elementos de este delito son el carácter terminante, directo o expreso de la orden dictada por la autoridad o sus agentes en el ejercicio de sus funciones, debiendo imponer al particular una conducta activa o pasiva; el conocimiento real y positivo por el obligado; la existencia de un requerimiento por parte de la autoridad hecho con las formalidades legales, sin que sea preciso que conlleve el expreso apercibimiento de incurrir en delito de desobediencia caso de incumplimiento; la negativa u oposición voluntaria, obstinada o contumaz a la misma, que revela el propósito de desconocer deliberadamente la decisión de la autoridad; y la especial gravedad alcanzada.
Algunas fuentes consideran que este incidente puede obstaculizar su posible candidatura a la Alcaldía.
No es el primer incidente de tráfico que tiene la política madrileña. En 2011, Esperanza Aguirre viajaba con su marido en un Volkswagen Passat, cuando chocó contra el coche que iba delante. Ella salió ilesa; los ocupantes del otro vehículo tuvieron que ser trasladados de urgencia a un hospital cercano. En su cuenta de Twitter, la Presidenta del PP madrileño, confirmaba que se encontraba bien: "Muchas gracias por preocuparos por nosotros, Fernando y yo estamos bien. Un fuerte abrazo a todos", sin reportar el estado de salud de las víctimas del otro auto.