Ha nevado.Desde la 6ª planta del hospitalse ve la ciudad color pomada.Ligeramente ladeadadescansa mi madrey yo velo su sueño.Una intimidad de sangre,olvidado todo lo demás.Y en esta quietudtodo el amor que podemosquitarnos. Como quien comelentamente de una bandejade pasteles, sabiendo que esuna de las últimas.Por el placerde despertar y decirHola madreHola hijo.Otra vez.Algún tiempo todavíaantes de morir.
Michel Gaztambide, de la revista Ex Libris (nº 6)