Como no estoy dispuesta a comprarle una he recuperado la temible bici de la que os hablaba en una de mis entradas y que resumo contando que se salía la cadena todo el tiempo.
El caso es que como la cadena estaba tan dura el niño tenía que hacer un esfuerzo terrible para moverla así que hoy después del cole hemos ido a arreglar la bici.
Al llegar al taller bronca con el niño porque no se quería bajar de la bici para subir el escalón, afortunadamente me han atendido rápido y tímidamente he preguntado si esa bici se podía arreglar (yo iba a pedir presupuesto previo) el técnico la mira y me dice' no creo señora, eso es más un juguete que una bici' a todo esto Ignacio a grito pelado 'Arreglar la bici y a la calle, arreglar la bici y a la calleeeeeeeee a que si mamá a que siiiii', y el técnico en bicis hablándome de rodamientos y no se que y yo mientras ponía cara de interesada y entendida pensando como le iba a decir al niño que no íbamos a arreglar la bici. Total que después de una parrafada me dice 'si quiere intento tensar la cadena y lo que aguante' 'pues eso me parece muy buena idea'
Tras apretar una serie de cosas (me he fijado muy bien por si me toca algún día) y no cobrarme nada nos hemos ido a la calle y que error he cometido tensando la cadena, Ignacio se ha puesto a darle y como era tan fácil ha echado a correr como un loco y yo gritando y corriendo detrás (con tacones y falda) y mirando también para atrás porque le había dejado a Irene en la tienda, y es que cómo se me ocurre enseñarle a andar en bici y no enseñarle a frenar?????
No cometáis el mismo error que yo, claro que os garantizo un ejercicio físico intenso y barato barato