(Ismael Serrano)
Los sentimientos parecen inundar los lugares para siempre, en los hospitales se pueden escuchar sonidos de enfermos de salas abandonadas por fantasmas. Mientras que en los cementerios el silencio de la muerte hace que sólo se oiga la tristeza como parte del luto... así también los aeropuertos están llenos de ilusiones y las estaciones de trenes están colmadas de sueños y ganas de empezar. Es por eso tal vez que en los alrededores de las estaciones de trenes o buses interprovinciales tienen esa mezcla de lo dejado y lo nuevo, como si fuera una prolongación de ciudades menores, ahí vemos esos hoteles baratos, mezclados con lugares de comidas típicas y tiendas de ropa de menos costo... es al primer lugar que se llega y el primero que se conoce con las miradas de lo que se deja... esa es la gracia de las estaciones... a diferencia de los aeropuertos... abandonados en medio de la nada que no representan países ni ciudades, son lugares que parecen no tener país, las estaciones de tren reciben todos los días ese ganado de personas que duermen en otros lugares los sueños que las ciudades les entregan.
entre todas las cartas que llegan está la que dictó Ana (Soia Lira) en que pedía a su marido regresar a la casa para que conosiera a su hijo Josué (Vinicius de Oliveira).
Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Página de la película
4.- Central do Brasil en Wikipedia
5.- Trailer