Estado de inquietud

Por Finicolasgafas @Finiconlasgafas
Si buscas un sitio es que necesitas saber a donde ir. Sentirte extraño es tu estado natural. La inquietud te inquieta, te arde, te adormece y no encuentras la forma de salir del fornido letargo. Pareces una figura de mármol en medio de un vendaval, un figurante borroso en una imagen de acción, una sombra en una tarde soleada, un incomprensible desliz en terreno llano. La pendiente es de fatídica inclinación. Parece que nada esté hecho para ti. Buscas una salida en el callejón, un asidero en el precipicio y una fortaleza en la debilidad. Cuando te rodea la indecisión, decides no moverte. Cuando te impulsa la ingravidez, te conviertes en pálido cemento. Y cuando la ansiedad es tu pulso acelerado, te quitas de en medio como vapor de agua en ebullición. La mañana más vulgar acaba estropeando tu noche más excelsa. La piel se torna roca al perder el sentido y el beso más dulce te parte los labios dejando púrpura el mentón. El golpe es la forma en que se expresa el corazón al latir. La fiebre te hiela y el tiempo te devuelve al cascarón. La vida es un fugaz intervalo jocoso entre el nacer y el morir exento de importancia. Escuece no comprender tamaña simplicidad. Es frustrante sobremanera buscar un sitio en la eternidad, sobre todo si no entiendes que solo perteneces al instante. Eres material de olvido como absolutamente todo el resto lo será.