Chechu Rubiera ha dicho adiós al ciclismo esta temporada. Tras 16 temporadas en activo, ha decidido colgar la bici a sus 37 años. Y este adiós estará marcado por Lance Armstrong.
Para Rubiera, ¿cómo será el cambio de ciclista profesional a "persona normal"? "Será un cambio drástico en mi vida, pero no me preocupa el dejar la competición. Estoy cansado de estar lejos de casa y quiero dedicar más tiempo a mi familia".
Aunque no tiene muchas victorias en sus palmarés, su trayectoria como gregario ha sido muy buena. "He tenido la suerte que no otros tienen de decidir yo mismo cuándo era el momento de dejarlo".
Sin contar el Criterium de Oviedo (que se celebrará el 30 de este mes), Chechu ya sabe cuál será su última competición: el Giro de Lombardía. Allí, es uno de los lugares donde Chechu guarda sus mejores recuerdos. "Allí es donde logré mis victorias más importantes (1 victoria en el Giro de 1997 y otra en 2001). En Lombardia espero hacerlo lo mejor que pueda, como siempre he intentando durarnte toda mi carrera".
En el año 2.001, Rubiera compartía equipo con Lance Armstrong. Estamos hablando después de que Chechu estuviera en el Kelme. ¿Qué hacía en el US Postal? "El equipo buscaba gente nueva para reforzarse en las etapas de montaña y se fijaron en mi. El equipo, el idioma y todo eran nuevos para mí, pero supe relacionarme bien con todos ellos". Aquí es donde nace su relación con Armstrong. "Congeniamos bien porque a él también le gustaba el trabajo serio y valoraba los entrenamientos duros, como yo".
Desde entonces, Lance (qué mal me cae) quería los servicios de Rubiera. "Siempre estuve a gusto con él y, a pesar de que nos veíamos esporádicamente durante la temporada, la relación con Lance era muy especial y sé que puedo contar con él para lo que sea".
Pero, como todo en esta vida, también hay momentos malos, "no sólo cuando los resultados no llegaban, sino cuando perdías amigos en la carretera, como cuando fallecío Manuel Sanroma, o la pérdida de Ricardo Ochoa. Son los tragos más difíciles de mi carrera".
En 2010, Chechu decidió seguir con Lance en el RadioShack. El americano fue el que le pidió seguir con él en esta nueva formación. ""Él fue quien me convenció y no lo dudé porque el trato era muy bueno, el equipo era el mejor y estar a lado de Lance siempre te beneficia. Quería estar junto a él en esta nueva etapa".
Así le ha dicho "adiós" Lance...
Lance quiere despedirse de Chechu diciendo que es un ciclista con una muy buena carrera. Pero hay unas palabras que, saliendo de Lance, seguro que a más de uno (a mí incluido), os fascinan: "Chechu, mi amigo, la amistad y la lealtad son incomparables. ¡Te quiero hermano!".
Pero no todo va a ser Lance, y también está otro... Como Johan Bruyneel. "Su papel fue guiar al equipo en la carretera y compartir su experiencia con todos los corredores jóvenes. No puedo contar cuántas horas corrió al frente del pelotón, pero fuera de la bicicleta también era importante para sus compañeros".