La tecnología sigue avanzando a pasos agigantados, en la actualidad son cada vez menos las cosas que te sorprenden, el siguiente vídeo tiene grandes probabilidades de hacerlo.
The Mill ha creado Blackbird, un vehículo que revolucionará la forma en cómo se filman películas y comerciales.
Su primer característica es poder transformar su chasis para que se asemeje en medidas (longitud y anchura) a cualquier auto disponible en el mercado, además utiliza un motor eléctrico capaz de replicar las características más comunes de la conducción, por ejemplo los cambios de velocidades y la aceleración.
Esta equipado además con un grupo de cámaras y estabilizadores de imagen, logrando ángulos y tomas inigualables.
A partir de ahí, los efectos especiales hacen su magia.
El vehículo tomará la forma de cualquier auto que desees.
Adiós a los costos relacionados con el uso de autos reales en todo tipo de filmes. Incluso podrías simular conducir un auto que aún no ha salido a la venta o algún concepto dado a conocer por alguna empresa. El abanico de posibilidades es amplio.
Como siempre, para muestra basta un vídeo: