TODOS se ríen de mi amor
por mi mesa de cristal negro,
la que compré ya vieja y gastada.
No ven que la bombilla, redonda,
se hunde en ella como la luna
en un charco.
MI HERMANA no me quería verdecía que mi charla no era naturalque no hablaba de cosas normales y sin importanciaque la miraba esperando el momento en que una verdaderaconversación comenzasey ella tenía ganas de hablar de ropacomo las señoras normales que la tranquilizabanque estaban en su sitio sin querer estar en otro, sin prisa,solo ahí, quietasarrugando servilletas con dedos nudosos con anillosdorados o comiendo algo pequeño
entonces yo fingía alegría e interés por las cosasmaterialesle preguntaba por una falday ella gritaba rabiosa, con la boca llena de saliva ylágrimas en los ojos¡no te sale!¡Falsa! ¡No te sale!
Estefanía González. Raíz encendida. Ediciones La Baragaña, 2014. Del prólogo: Juan Gallo. De la ilustración de cubierta: Dolores Sampol.