Si la película Tiburón (Jaws) estuviera rodada en Groenlandia, estaría protagonizada por un tiburón frustrado que no es capaz de alcanzar a ninguna víctima. Lo más que podría esperar es que murieran por hipotermia para comérselas.
Resulta que el tiburón de Groenlandia (Somniosus microcephalus) es tan lento que las focas de las que se alimenta se escapan cuando las persigue. Mientras que el tiburón no alcanza ni los 2 km/h, las focas doblan esa velocidad. Incluso tarda 7 segundos en mover una vez su aleta caudal. Para comparar, el tiburón mako (Isurus oxyrinchus), el tiburón más rápido, alcanza más de 32 km/h. Lo lógico sería pensar que estos tiburones no tienen más remedio que alimentarse de otra cosa, pero los análisis indican que comen focas vivas. Por lo tanto se puede descartar una dieta carroñera.
Lo que hacen los tiburones es esperar que las focas se duerman para acercarse lentamente. Irónicamente, las focas duermen en el agua para evitar a los depredadores, como los osos polares.
Fuente: Science direct, Io9