Estrategia de Marketing Digital

Publicado el 03 octubre 2013 por Jmgomezzorrilla @gomezzorrilla

Siempre se nos recuerda qué pasos debemos seguir para elaborar una estrategia de marketing, y, esto, realmente sirve de ayuda, porque nos traza el rumbo que debemos continuar de una manera más o menos ordenada y estructurada.  El cometido es no perdernos cuando buscamos elaborar esa táctica que nos ayudará a diseñar un planning estupendo para la consecución de nuestra meta, o la de nuestra empresa.

Por romper un poco los esquemas, y, sobretodo, para no tener que sobreescribir esa estrategia de marketing, os recordaré algunos fallos que podemos cometer, y que, nos harán perder el tiempo.

El objetivo que trato de alcanzar en este post consiste sobretodo en ahorrar energías y rentabilizar el esfuerzo de una manera más adecuada, así que, espero os sea de utilidad.

Primer error

El primer gran error, evidentemente, es la no planificación: hace poco escuché de labios de un buen amigo una frase que se me quedó grabada, y que viene al hilo de este artículo, así que, la compartiré con vosotr@s encantada: “No planificar, es planificar el fracaso”. Nada más cierto que esto.

Opino que, si no planificamos no estamos trazando la ruta idónea que vamos a emplear para convertir a nuestros seguidores en potenciales consumidores de nuestros productos o servicios que es nuestra finalidad última.

Por poner un ejemplo, es como si nos vamos de viaje y no sabemos a qué hotel iremos: el resultado, obviamente, puede ser terrorífico.

Para que consigamos un alto volumen de conversión tenemos que hacer un estudio completo y posteriormente un buen plan de social media, que sea real y que, minuciosamente, hayamos analizado.

Segundo error

El segundo error es tener presencia en todas las redes sociales sin prever cual puede venir mejor a nuestro negocio: me explicaré con más claridad. En ocasiones me encuentro con negocios que están en absolutamente todas las redes sociales existentes, cuando quizás lo más acertado, bajo mi punto de vista, es analizar de nuevo cual es nuestro público objetivo, dónde tienen mayor presencia y actuar con más fuerza en éstas, evitando malgastar energías en otras que no servirán a nuestro cometido.

Si somos omnipresentes, podremos perder el control de nuestros objetivos, mientras que, si focalizamos nuestra presencia en 2 o 3 que sean realmente efectivas, obtendremos más resultados y podremos dar mejor respuesta a nuestros seguidores, así como llevar a cabo estrategias que nos acerquen más a nuestros followers, fans… A nuestra comunidad, en definitiva.

Tercer error

En tercer lugar, otro error es carecer de continuidad en redes sociales y blogs: debemos dar la sensación de continuidad y de cuidado de nuestras redes sociales, así como contestar a nuestra comunidad con cortesía, y, cómo no, aceptando las críticas constructivas.

Por supuesto no interactuar con los trolls y caer en sus redes, descalificándoles, en un arrebato o acaloramiento porque lo que buscan es llamar la atención deliberadamente y hundir nuestra marca, y, por supuesto, utilizarán cualquier arma.

Como ya comenté en el pasado en uno de mis posts: “Nunca alimentar a los trolls”.

Otra puntualización versa sobre las publicaciones: es conveniente que se realicen a la misma hora aproximadamente, porque mantendrá a nuestros seguidores pendientes de qué publicaremos en este día y esto les “enganchará” a nuestra marca un poco más, si cabe.

Cuarto error

A mi parecer el cuarto punto negativo lo encontraremos en no planificar qué vamos a redactar en nuestras redes sociales: no podemos estar continuamente hablando de nosotros, ya que, caeremos en el egocentrismo y, evidentemente, esto puede ser devastador para nosotros y nuestro negocio.

Dejaremos de crear expectación y cercanía, y además, los que hasta ahora eran nuestros seguidores perderán el interés y nos pueden calificar de spammers. Es algo así como presumir constantemente de que somos los mejores y los más “listos” de la clase, y, probablemente lo seamos, pero el movimiento se demuestra andando, y nuestros seguidores se percatarán de ello sin necesidad de que constantemente se lo estemos recordando.

Intentemos ser sutiles, elegantes, amigables, humanos y cercanos, esto siempre se agradece.

Además no debemos olvidar que es preferible ser generosos con los demás, compartir contenidos ajenos, porque seguro, te devolverán el favor, y lo mejor de todo es que crearemos expectación y ofreceremos una amplia información sobre nuestro sector. En muchas ocasiones, cada vez más, la gente se entera de según qué noticias por las redes sociales antes que por los periódicos, pues ¿por qué no contribuir? Seguro que atraeremos más público.

Por supuesto, no digo que no hablemos de nuestra marca, faltaría más, pero hagámoslo con mesura, con discreción y sin saturar al personal. Basta con una inserción semanal para que la comunidad entienda que no somos una ONG.

Quinto error

Por último, considero que el mayor fallo es no estar al tanto de las novedades: internet y el mundo de las redes sociales constituyen un medio bastante variable, ya que, día tras día encontramos algo nuevo que nos sorprenderá y lo que hoy nos puede servir, mañana dejará de tener efectividad.

Por lo tanto, tendremos que levantarnos leyendo y viendo qué se cuece en internet, porque si debemos realizar una o varias modificaciones, ahí estaremos nosotr@s.

Quizás, esto es, precisamente uno de los aspectos más atrayentes, bajo mi punto de vista, de este mundo en el que nos movemos, y es que, no permanece inalterable a los cambios, y ello constituye para los community managers, bloggers, seos, etc. un reto continuo, apasionante y efímero.

¿Qué opináis?