Seguro que a muchos de vosotros os suena El arte de la guerra. Es un tratado que se le atribuye al general Sun Tzu y que se escribió hace 2500 años en el que se exponen muchas circunstancias, estrategias, recomendaciones, tácticas y pensamientos filosóficos para que el lector, obviamente influenciado por su lectura, esté más preparado ante la contienda bélica.
-Me dijiste que tu marido era artista
-Y lo es
-Pero lleva uniforme de soldado
-Qué poco leemos los clásicos, qué poco...
El caso es que no hace mucho me apareció un anuncio para unas charlas en las que se discutiría la aplicabilidad del arte de la guerra al márketing y a la informática.
-¡El cliente es el enemigo!
-¡Señor, sí señor!
-¡No hay que concederle nada!
-¡Señor, no señor!
-¡Y a la primera de cambio, abrid fuego!
-¡Señor, nos estamos pasando, señor!
Aunque seguramente más de uno se batiría en duelo de ametralladora con algún cliente y aunque seguro que hay aplicabilidad de las enseñanzas de Sun Tzu en el ámbito laboral, el arte de la guerra sirve de pretexto o justificación para hablar de estrategias y tácticas.
En el título de esta entrada hay un par de conjunciones copulativas que paso a describir programáticamente:
-Y: And
-O: Xor
Los viejos del lugar sabréis que la Xor es la or exclusiva (o uno o lo otro pero no los dos a la vez) y aquí es donde quería llegar.
En los últimos 6 meses he visto un auge espectacular en lo que a herramientas 'tácticas' se refiere en detrimento de las estratégicas. Y, obviamente, los planteamientos de las empresas han variado girando hacia la táctica en lugar de la estrategia, llegando incluso al práctico desuso o desmantelamiento de este tipo de aplicaciones y herramientas.
En los tiempos de Sun Tzu, enviar un correo y recibir respuesta del otro lado del mundo era algo que, de haberse hecho, tardaría años. Ahora es cuestión de segundos (más el cambio de hora para encontrar al receptor despierto).
¿Son estas velocidades en los tiempos de respuesta los que han vuelto a tantas empresas cortoplacistas en sus operaciones antaño estratégicas? ¿Una buena cartera de tácticas es suficiente para solventar la falta de estrategia?
-Aún no hemos perdido ninguna batalla, maestro
-Pero no sabes qué guerra estás luchando
-Maestro, eso es muy profundo
-¿Quieres tirar los dados de una vez?
Esto te hace pensar si es algo relacionado con la crisis. Igual que al principio de ella hubo un parón en las inversiones en proyectos y después los que se hacían eran aquellos que permitían escudriñar en la reducción del gasto, ¿es ahora el momento de los proyectos tácticos que permitan asegurar a corto victorias para ir con un buen historial a la guerra que se elija más tarde?
Dicen que los que no conocen la historia están condenados a repetirla (que supongo que se refiere sólo a las cosas malas) y tal vez conocer las andanzas y enseñanzas de Sun Tzu nos pongan en una situación mejor para enfrentarnos a nuestros enemigos...
Aunque sea en el Call of Duty...