La marcha, que según sus organizadores contó con la asistencia de 100.000 personas, se desarrolló en forma mayormente pacífica por las calles de la capital, con carteles y frases exigiendo al Gobierno la gratuidad de la educación pública, en un conflicto que se extiende por unos tres meses.
Las manifestaciones acabaron con al menos 273 detenidos y 16 civiles y 23 policías lesionados, según informó el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, quien agregó que los actos de "violencia se focalizaron en la capital.