Et enfin moi. Problemas de pronunciación

Por Bergeronnette @martikasprez
Sí, de pequeña yo tenía un mélange de palabras, que nadie las quisiera para sí misma. De hecho, incluso ahora, muchas veces en una conversación en español, digo una expresión o una palabra en francés, porque no consigo encontrar la palabra correcta en español. Esto para las traducciones que tengo que hacer es un poco latoso, porque les pregunto a mis compañeros cómo se dice, por ejemplo, ese mueble que tenemos en la habitación que llenamos con ropa y tiene puertas, y me dicen que "armario", y yo podía estar cinco minutos pensando en armoire, y no conseguir la traducción. Y esta palabra es de las fáciles.
De pequeña, tenía problemas de dicción con la letra "ele". La cambiaba por la letra "i". Así el plátano era piatano, el color blanco era el bianco, y así en unas cuantas más. También me costaba mucho, y me sigue costando pronunciar los fonemas "ese ce" cuando están juntos: piscina, ascensor y sus derivados.
Estando en las islas debería ser más fácil, ya que debería decirlos con la "ese", pero no he conseguido todavía tener el acento que no denote que no soy de aquí.
Y por último, el más grave, y el que, me da pie para hablar -en otro post- de los primeros problemas verbales de l'aînéey los trucos que estamos ensayando para que pronuncie bien, es la palabra coche. ¡Yo era incapaz de decir coche! Recuerdo a mi madre llevándome al colegio, y repitiendo la palabra. Y yo, sólo era capaz de decir "cose". Que vale que tampoco necesitaba decirla, y menos en español, pero recuerdo difuminadas las burlas de los compañeros.
Así que el truco que me dio mi madre era que intentara pronunciar coche como si tuviera una "te" delante, algo así como "cotche". Y funcionó.
Mañana, os explico en que consisten los fallos de pronunciación de l'aînée y los juegos que hacemos con ella.
De momento, y si te has quedado con ganas de más, puedes comentarme (y así me alegras la mañana y/o tarde) y pasarte por la nueva colaboración. Hoy, los libros más vendidos del 2012.