Pues mira, así, a lo tonto, ya sólo queda un mes para que mi santo vuelva a casa. Tanta queja y tanta historia, y se ha pasado en un plis plas....Si es que me ahogo en un vaso de agua...Estas son frasecitas molonas de gente a la que le habría dado un capón con ganas. Pero como no soy de reacciones rápidas, me limito a mirarlo con "ojos que lanzan cuchillitos" y a decir tacos por dentro....2 horas después.En fin, que lo que importa es que ya está prácticamente terminado, finito, caput, ended....y a la vuelta...a la vuelta empieza el asunto de "cómo acoplar de nuevo a un padre en tu vida y la de tus hijos tras haber estado fuera 6 meses". Es decir, tengo que ser paciente y relajarme, porque, al igual que cualquier adicto, tengo que dejar el "modo cuartelero" poco a poco. Vaya, que no puede ser que él llegue a casa riñendo como poseso (para eso estoy yo, la malvada madre exigente), ni que vuelva con el lema de "esto es la casa de tócame Roque". Mesura. Equilibrio. Modo Zen. Vale. Y eso, ¿dónde se compra? Porque los dos hacemos intentos, pero a veces se queda ahí, en un intento. Pues vaya, que yo creo que estoy madurando (que no haciéndome mayor) porque esta es de las veces me propongo tomármelo con más filosofía y tranquilidad. Las cosas serán como salgan. Y punto.Pero vayamos a lo que iba.... Estos 5 meses están siendo largos, a ratos insoportables, y otros ratos no tanto. Pero la realidad es que se van aguantando y sobrellevando, a veces incluso con alegría, gracias a varios factores:- Gracias al propio buenpadre que, aunque lejos, está al día de todo lo que pasa- y lo que no- en casa. Y que viene cada dos fines de semana a dejarse morir de agotamiento para vernos y procurar que yo descanse.- Gracias a la familia, directa y política, que está pendiente de todo en todo momento, rápida para salir corriendo a casa en caso de necesidad, o simplemente para charlar un rato. siempre están ahí (incluso me han permitido malamadrear "a gustitamente") - Gracias a los amigos, que están al otro lado del teléfono en cualquier momento, y a una tecla de distancia en el whatsapp....a pesar de todo, vaya risas....- Gracias a los demás padres del cole, que en cuanto me sobreviene la desesperación a las 7 de la mañana porque alguno se queda colgado sin nadie que le acerque al cole, están dispuestos a solucionarme la papeleta.- Y, por supuesto, gracias a los buenohijos....Hoy los odio un poquito, y así seguirá hasta que me tome otro café (la noche ha sido más que toledana) pero la verdad es que se están portando muy bien, y me apoyan, entretienen (de esto mucho) y acompañan...sobre todo durante la noche.Así que, lo dicho, falta poco ya para volver al modo normal. Lo cual veremos si quiere decir que dejo de ser madreloca....¿qué opinas? Yo lo dudo....al fin y al cabo, la normalidad está sobrevalorada.