Eva Mendes —actriz estadounidense, protagonista del calendario Campari— ha añadido su nombre a la larga lista de celebridades que piden un trato ético a los animales. La actriz posaba, hace justo tres años, para Peta ( Personas por el Trato Ético de los Animales), organismo con más de dos millones de miembros y simpatizantes, bajo el lema: “¿Pieles? Prefiero ir desnuda”, como ya hicieran previamente Alicia Silverstone, Christina Applegate o Pamela Anderson. Y lo hacía como había venido al mundo, junto a otras bellas celebridades como Milla Jovovich, Serena Williams y Joss Stone en la revista Jane, para Clothes Off Our Back, una organización sin fines de lucro que subasta ropas de las celebridades para niños necesitados. La portada estaba inspirada en una famosa fotografía de Marilyn Monroe.
En noviembre de 2009, la actriz, descendiente de familia cubana, aseguraba que no tenía ningún problema en desnudarse frente a las cámaras si la ocasión lo requería en el ámbito laboral. “No me permito a mí misma ser encasillada, pero cuando tengo que explotar mi sexualidad y hacer un anuncio impresionante es algo muy consciente, no es un accidente. Es muy metódico por mi parte”, declaraba la actriz de 35 años quien confesaba que jamás se sintió explotada en aquellas ocasiones en las que mostraba su cuerpo, ya que no tenía ningún problema por los desnudos.
Eva, quien realizó recientemente una producción de fotos hot para la campaña de un perfume de la firma Calvin Klein, y aseguraba que se sentía muy orgullosa de su aspecto, sigue acudiendo a clases de interpretación porque quiere ser “más loca, más avanzada, más oscura y más valiente”. Y admitió que su verdadera meta sería llegar a ser “la mejor”.
La protagonista de “Teniente Corrupto” posa en la actualidad para la firma Dolce & Galbana en la revista “Allure”, al mismo tiempo que es entrevistada en exclusiva. Eva admite que ha “trabajado muy duro” para llegar a “quererse” a sí misma y sentirse “atractiva”. De hecho, dice que esto es lo que ha hecho que la gente llegue a tenerla tanto cariño. Y confiesa que sigue poniéndose nerviosa cuando trata de desnudarse ante las cámaras. “Nadie nunca me ha dicho: 'Eva, eres tan valiente por hacer desnudos integrales'. Solo porque soy atractiva no significa que no me asuste”. Eva quiere ser conocida por algo más que por ser una mujer “sexy”. Pero también admite que su imagen es su propia responsabilidad y algo de lo que tiene que preocuparse ella misma. “Soy definitivamente responsable de la imagen que doy ahí afuera. Pero resulta frustrante porque no quiero que 'sexy' sea la característica que me define. Me encantaría que me definieran también por mi ambición, voluntad, intelecto y sentido del humor”.
En otra entrevista en la página Web del diario italiano “Corriere della Sera”, la actriz confiesa que, de pequeña, soñaba con ser monja.“De pequeña soñaba con ser famosa para comprar un chalet y llevar a mi madre en limusina. Al mismo tiempo quería ser monja. Hasta que, un día, mi hermana Rebeca me dijo: 'Pero ¿sabes que a las monjas no se les paga?' Ya nunca más hablé de tomar los votos”. Mendes alaba el espíritu de sacrificio de su madre, quien, tras el divorcio de su padre, sacó adelante a cuatro hijos, algo por lo que la actriz no querría pasar. “De pequeña mis ídolos eran (las actrices italianas) Sofía Loren, Gina Lollobrigida y Claudia Cardinale. Mujeres de gran integridad pero con una fortísima carga erótica”, apunta la actriz. “Quizá si el cineasta italiano Federico Fellini estuviera aún vivo: me encantaría hacer un filme suyo”.