A Everything But the Girl se le abrieron las puertas del Olimpo cuando Todd Terry le remezcló el tema "Missing" y lo convirtió en un himno a mediados de los 90s. A partir de ahí, la música melancólica de Tracey Thorn y Ben Watt se llenó de electrónica y house sin perder ese ápice ensoñador y triste que imprime a sus canciones.
Las vesiones del tema se cuentan por decenas aunque, en verdad, la de Todd Terry consiguió eclipsar todas ellas e, incluso, la original.