El encontrarnos pelo en cantidad en la ducha, en la almohada o en el peine es preocupante y si no se pone remedio con el tiempo se va perdiendo volumen, la línea frontal retrocede o empezamos a ver calvas. Por lo general, la caída comienza cuando el periodo de estrés ha finalizado por lo que muchas veces no identificamos la causa con el estrés pasado sufrido.
Realmente no existe una fórmula mágica con la que digamos podemos evitar la caída del cabello, pero si hay algunas soluciones que pueden ayudar a frenar ese proceso. En el caso de que la caída se deba al estrés debemos en primer lugar evitar o gestionar esas situaciones de forma tranquila. Aprovechar para descansar y alimentarnos correctamente ya que eso se refleja en el cabello, aprovecha para tomar alimentos ricos en vitaminas, hierro y zinc.
A veces con estos cambios conseguimos mejorar un poco pero no logramos reducir lo suficiente esa caída, en ese caso lo mejor es acudir a un especialista que nos recomendará el tratamiento más adecuado en nuestro caso. En el mercado existen actualmente multitud de de productos que nos van a ayudar en esa labor, desde champús, ampollas, complementos alimenticios, etc.
Vamos a relajarnos y a disfrutar de las cosas que nos gustan para reducir el estrés y poder lucir una melena sana y abundante.Un abrazo y os veo en mi siguiente post.
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