Manchas en la piel: hazlas desaparecer con el ritual Dulkamara Bamboo
Las manchas en la piel del rostro y las manos son una de las pesadillas derivadas de la exposición solar a lo largo de todo el año, especialmente en verano. Sin embargo, evitar el Sol completamente no es la solución: El sol es, sin duda, una fuente de energía imprescindible para nuestra salud: proporciona aliento al organismo y es también un estímulo fundamental para sintetizar la vitamina D. Si nos exponemos a él con moderación y con sentido común y adecuamos la duración y frecuencia de la exposición a la intensidad de la luz solar y a la sensibilidad del tipo de piel, sus radiaciones van a generar efectos muy positivos en nuestro organismo y más adelante te explicamos cómo hacerlo evitando las temidas manchas en la piel.
Una exposición moderada al sol proporciona, psicológica y fisiológicamente, salud, sosiego mental y bienestar general. Estimula la circulación sanguínea, aumenta la formación de hemoglobina y también puede promover una reducción de la presión arterial. Numerosos estudios demuestran que la vitamina D tiene una variedad de importantes beneficios: contribuye a equilibrar la glucosa, a proteger contra 18 tipos diferentes de cáncer y a potenciar el sistema inmunitario evitando trastornos alérgicos, resfriados, etc. Asimismo, protege contra virus y bacterias y contribuye a prevenir la osteoporosis. Evitar el sol por completo es una “moda” nociva: cada vez hay más casos de raquitismo en Gran Bretaña, debido al pánico al sol creado por los ambientalistas y al uso de pantallas solares. El sentido común nos dicta que hay que tomar el sol imprescindiblemente, pero en dosis moderadas y con protección adecuada.
En el verano hay que cuidar la piel del fotoenvejecimiento, proceso visible en la epidermis cuando aparecen arrugas y manchas en la piel oscuras. (En este asombroso video puedes ver lo que el Sol hace con tu piel). Las quemaduras solares favorecen el fotoenvejecimiento que se traduce en líneas de expresión más marcadas y manchas en la piel. Son lesiones temporales de la epidermis que pueden ser ligeras con eritemas o dolorosas con ampollas en los casos más graves. Además, las quemaduras solares son acumulativas, en efecto, la piel tiene memoria.
CONSEJO FUNDAMENTAL: Evitar una exposición prolongada, sobre todo, en las horas de máxima intensidad. Es aconsejable “tomar el sol” por la mañana de 8 a 12 y a partir de las 5 de la tarde.
Cómo reconocer la causa de las manchas
Si la exposición solar es la responsable, las manchas se localizan principalmente en la cara y manos por estar más expuesta a las radiaciones solares. Se intensifican en verano, pero hay que tener en cuenta que pueden verse potenciadas por otros factores: las alteraciones hormonales, la toma de anticonceptivos y los tratamientos con medicamentos fotosensibles. Externamente, determinados perfumes, conservantes o grasas sintéticas pueden favorecer la aparición de manchas al exponernos al sol, al igual que influye la contaminación ambiental.
Ritual Dulkamara antes de la exposición solar
Es imprescindible salir a la calle con la piel bien limpia, libre de oxidantes y, para ello, recomendamos un sencillo ritual de belleza con los legendarios productos, que nos asombran cada día que pasa, de Dulkamara Bamboo:
1-Exfoliar la epidermis la noche anterior a la exposición solar, con Peeling vegetal bambú. Se puede repetir dos veces por semana, mojando la piel y masajeándola, suavemente, con el exfoliante, con movimientos circulares. Enjuagar muy bien.
2- Depurar, higienizando y drenando la piel, cada mañana y cada noche, con las Savias de bambú, ya que sus componentes vegetales actúan inhibiendo los radicales libres (responsables del envejecimiento), apaciguan la piel y ayudan a resistir los efectos del estrés ambiental. Esta legendaria solución limpiadora, que es también un tratamiento, reduce visiblemente el exceso de aceites y elimina las impurezas de la superficie de la piel, proporcionando un aspecto más sano y equilibrado.
3-Para finalizar, tonificar y acabar la limpieza, hay dos opciones:
A) Dejar actuar las Savias como base de cualquier otra crema de noche, serum, tratamiento, o bien solas.
B) En caso de tener la piel extremadamente sensible y seca, limpiar con Leche virginal bambú que calma intensamente la piel irritada. Si la piel es extremadamente reactiva, sustituir las Savias de Bambú por la Leche Virginal.
Dulkamara durante la exposición solar: Sin duda, la Crema Bioactiva Fp6
Un buen protector solar, puede ayudar a prevenir la aparición de manchas y el envejecimiento prematuro. Para ello conviene escoger una crema con filtros físicos que hidrate la piel de forma natural y aporte antioxidantes vegetales.
A diferencia de otros fotoprotectores, la Crema Bioactiva Fp6 consigue mayor grado de protección, incrementando el contenido de melanina de la epidermis, con una alimentación rica en clorofila, beta-carotenos, antocianos y ácidos grasos esenciales. Usada en invierno, puede proporcionar a la piel un ligerísimo halo dorado que contribuye a un tono uniforme de la piel y a mantenerla protegida de forma natural del sol.
Pero en la época veraniega, es una crema diez:
- Porque, como hemos dicho, potencia ligeramente la producción de melanina, uniformizando el tono de piel y protegiéndola de forma natural.
- Porque contiene extracto de regaliz que suaviza y calma el eritema solar, el enrojecimiento de la piel y es un eficaz y regenerante “aftersun”.
- Porque su acción biológica es muy adecuada en caso de pieles sensibles, delicadas e irritables, sustentada en una maravillosa asociación de aceites vegetales muy nutritivos y “alisadores” (Jojoba-karité-sésamo-aguacate) potenciada por los extractos de malvavisco y bambú, que previenen y evitan la sequedad de la piel.
Tres preguntas sobre Crema Bioactiva Fp6 que siempre queremos hacer:
¿CÓMO ES LA TEXTURA? Ultra ligera, hidratante, nada grasa, antioxidante. La Crema Bioactiva Fp6 está certificada BIO y por supuesto no contiene ingredientes perjudiciales.
¿CUANDO HAY QUE APLICARLA?
Es importante aplicarla media hora antes de la exposición al sol y reaplicarla de forma regular y generosa para mantener la protección, especialmente después de nadar, de transpirar o de secarse,
¿CUÁNTO ME PROTEGE SI EL FILTRO INDICA QUE SE TRATA DE UNA PROTECCIÓN “BAJA” (FP6)?
Como ya hemos explicado, la forma de protección de esta crema no es la de un filtro químico convencional. Al estimular las defensas de la piel, hace que ésta sea cada año más resistente al sol. Muchas personas la aplican como fotoprotector y se sorprenden de una protección que consideran “completa” y mucho más elevada de lo que indica el filtro. Sin embargo, nosotros recomendamos, por seguridad, usar un fotoprotector Bio sobre la crema cuando la exposición solar es intensa (en la playa, etc).
AL FINAL DEL DÍA
En caso de sol excesivo, al final del día se puede aplicar pues posee un intenso poder regenerante y “aftersun”, aunque hay que recordar que la Crema Bioactiva FP6 es una crema de día: puedes usarla como aftersun, pero de noche no Si la piel se presenta irritada o enrojecida, la Leche Virginal ejerce un efecto calmante, refrescante y suavizante instantáneo y muy intenso.