En los inicios de la revolución Industrial los propios operarios se encargaban de las reparaciones de los equipos. Posteriormente, c
on el aumento de la complejidad de las maquinas se crearon los primeros departamentos de Mantenimiento. Las tareas en estas dos épocas eran básicamente correctivas.A partir de la Primera Guerra Mundial y sobre todo de la Segunda aparece el concepto de fiabilidad y los departamentos de Mantenimiento empiezan a buscar cómo prevenir las fallas.Aumentan los recursos destinados a Mantenimiento para incrementar la fiabilidad y la producción.Aparece el Mantenimiento Preventivo, el Mantenimiento Proactivo, la gestión de Mantenimiento asistida por ordenador y Mantenimiento basado en la fiabilidad (RCM). El RCM se basa en el estudio de los equipos, el análisis de los modos de fallo y en la aplicación de técnicas estadísticas y tecnología de detección, podríamos decir que el RCM es una filosofía de mantenimiento básicamente tecnológica.Paralelamente, sobre todo a partir de los años 80 se vuelve al modelo inicial, se piensa que puede ser rentable que los operarios de producción se ocupen del mantenimiento de los equipos.Se desarrolla el TPM, o Mantenimiento Productivo Total, en el que los operarios de producción realizan tareas hechas hasta entonces por el personal de Mantenimiento.Estas tareas son limpieza, lubricación, ajustes, reapriete de tornillos y pequeñas reparaciones.Con esto se pretende conseguir que el operario se involucre mas en el cuidado de la maquina siendo el objetivo último Cero Averías.TPM se basa en la formación, motivación e implicación del equipo humano, en lugar de la tecnología.En la actualidad se usan ambas formas de dirigir el Mantenimiento RCM y TPM.En algunas empresas RCM impulsa el mantenimiento y con esta técnica se determinan las tareas a efectuar en los equipos; después, algunas tareas son transferidas a producción, en el marco de una política de implantación de TPM.