Desde muchos blogs de inversión, incluso desde casas de análisis con reputación se nos está vendiendo la pardidad del euro con el dólar, como la posible evolución del par de divisas EUR-USD. No niego que esa posibilidad existe, como existen todas: podemos volver a máximos, o podemos ver un euro que se cambie frente al dólar por 80 céntavos, que es el mínimo histórico. ¿Quien lo sabe? Realmente nadie. La evolución de los pares de divisas, tiene que ver mucho con la marcha económica de los países que conforman el par, así como otras muchas variables difíciles de cuantificar, como son la inflación, los defícit de las balanzas económicas, y los riesgos políticos. Una ventaja que tienen los EE.UU frente a la moneda única común del euro, es que a pesar de tener una moneda común, la política económica de los países que conforman la unión, dista mucho, muchísimo, de ser única. Saber como va a evolucionar la economía europea es un ejercicio más propio de la Bruja Lola, que de un analista financiero. Europa, o mejor dicho, la “Unión Europea” se enfrenta a muchos retos, algunos de difícil solución como es el problema de la economía griega, otros problemas de migración, que pueden dinamitar el estado de bienestar de la Unión, por no hablar de un sistema económico basado en la protección social, y que poco a poco se está volviendo insostenible. Sin embargo EE.UU, con un sistema capitalista salvaje, tiene sus propios problemas. Aquí no hay un problema de estado para mantener la sociedad del bienestar, pero es indudable que necesita que su economía crezca para que los problemas no se multipliquen. Siendo muy críticos, la paridad no es descabellada desde el punto de vista fundamental, aunque técnicamente aún no es una posibilidad tan evidente.