Esta belleza de la naturaleza se encuentra a lo largo de 17 kilómetros de costa de Irlanda del Norte, en Bushmills, en el Condado de Antrim, a unos 100 kilómetros al noroeste de Belfast. Se trata de un conjunto de unas 40.000 columnas de basalto, de formato en su mayoría hexagonal.
El origen de esta formación según su explicación científica se remonta a unos 60 millones de años, debido a un rápido enfriamiento de lava de un cráter. A su vez, no faltan explicaciones míticas con diferentes leyendas celtas.
La zona que puede ser visitada es un suelo de columnas de basalto que encajan perfectamente una con otra, de ahí el origen del nombre de Calzada. Para acceder hay que abonar entrada, que según sus visitantes bien vale pagarla.