¡Exitazo! Jornadas Crianza en Red en Barcelona

Por Tenemostetas
Las Jornadas que la Editorial Ob Stare celebró el sábado pasado en Barcelona fueron un lujo.
El cartel era de liga de campeones y no esperaba menos, pero la intensidad, la preparación y la calidad sostenida durante la extensa jornada por todos los ponentes superó mis expectativas. En todos los congresos científicos siempre hay un porcentaje de intervenciones aburridas, convencionales o fuera de lugar: ¡pues en este no! Créanme.

Barcelona, Jornada Crianza en Red. Con algunas amigas al final.
Foto cortesía de Conciliación Real Ya. 


Fue un privilegio poder conocer a mucha gente de la red que aún no conocía personalmente, y sobre todo aprender muchísimo de todas sus experiencias. Este fue el intenso y apasionante cartel que compartimos:
Conferencia Inaugural: Advocacy Virtual y el poder de las redes, Claudia Pariente.
Conciliación Real Ya (CRYA), representado por Marta Gual y David Lay
Blog de la Asociación Sina, por Mar Alegre
Crianza, educación y conspiración. El Blog Alternativo, María del Mar Jiménez Redal
Foro Superando un Aborto, Mª Angels Claramunt
Estudio sobre el útero, Mónica Felipe
Historia del Foro Crianza Natural, Rosa Sorribas
Compartir es aprender. Adivina cuanto te quiero y Crianza y Educación,  Maite Lama
Blog De Mamas & de Papas, del periódico El País, Cecilia Jan
Foro Dormir sin Llorar, Rafaela López
En busca del perro verde (el papel del padre en la crianza), Psicología CEIBE, Alejandro Busto Castelli,
Blog El Parto es Nuestro, Angela Muller
Psicoterapia Perinatal On-line, Cristina Silvente y Monica Alvarez
Madres conscientes con poder, éxito y dinero, Femenino y Plural, Laura Martínez Hortal
y la conferencia de clausura, Redes Sociales, Redes Emocionales, a cargo de una servidora y cuyo resumen os dejo por aquí:
REDES SOCIALES, REDES EMOCIONALES
Conferencia para CRIANZA EN RED: I Jornada de foros, blogs y espacios de apoyo virtualAUTORA: ILEANA MEDINA HERNÁNDEZ
RESUMEN
"Porque todas las comidas se han cocinado, los platos y las tazas lavado; los niños enviados a la escuela y arrojados al mundo. Nada queda de todo ello; todo desaparece. Ninguna biografía, ni historia, tiene una palabra que decir acerca de ello." Virginia Woolf (Una habitación propia, 1929)
Desde la pasada década de los 80 (concepto generalizado a partir del libro La condición postmoderna, de Jean François Lyotard) los lenguajes postmodernos nos han ido anunciando los grandes cambios que, ahora, con el desarrollo de Internet  y la web 2.0, no han hecho más que afianzarse.
El fin de los grandes relatos, la valorización de la pluralidad de los sujetos sociales (minorías y sujetos subalternos, o sea: todos los distintos del hombre blanco occidental católico) y el relativismo de los discursos e interpretaciones, convierte a la Nueva Sociedad de la Información en un crisol/collage/mosaico de textos e infinitos sub-textos que se yuxtaponen en aparente desorden.
Por decirlo de otro modo: hasta ahora (en la Modernidad derivada de la Ilustración) ha habido unos saberes y unas instituciones “sacralizados”, controlados y canalizados a través de líneas unidireccionales de poder (el Gobierno, la Escuela, la Universidad, la Iglesia, los libros, los grandes medios de comunicación…) que en la actualidad están siendo ramificados, aumentados, enredados y enriquecidos por el amplio, vertiginoso e imparable desarrollo de Internet.
A la pluralidad de lenguajes: escritos, visuales, sonoros que ya era anunciada desde finales del XIX con la radio, el cine y la televisión, se une hoy el abaratamiento de los costes de producción de los mensajes audiovisuales (cualquiera graba hoy un video casero); y la posibilidad de compartirlos inmediatamente a través de la red.
Videos en Youtube, redes sociales de contacto inmediato como Facebook o Twitter (la vida retransmitiéndose en directo) y los espacios personales gratuitos de creación (blogs o bitácoras) están otorgando por primera vez una democratización de mensajes sin precedentes.
La barrera emisor/receptor se ha roto, y así es habitual afirmar que la principal característica de la web 2.0 es la posibilidad de que todas las personas se conviertan en generadoras de contenidos. La biblioteca infinita de Borges, el hipertexto infinito de los semióticos, la descentralización definitiva del flujo comunicativo… es hoy posible gracias a la multidireccionalidad e instantaneidad de la red.
El impacto social e intelectual de esta nueva realidad quizás sea pronto para valorarlo en toda su magnitud. Parece el principio del fin de las barreras autoritarias, que hasta ahora dividían el mundo en “preceptores” y consumidores pasivos. La tecnología no es inocente y la forma es inseparable del contenido (el medio es el mensaje, decía McLuhan): la apertura de la red anuncia la apertura de la vida hacia nuevas formas de autoridad (ya sean domésticas o políticas, por eso le temen tanto los dictadores); hacia nuevas formas de producir, distribuir y compartir la cultura (por eso le temen tanto los “intelectuales” de sillón); hacia la pluralidad real de los sujetos que pueden convertirse en protagonistas de sus textos, y quizás con ello de sus vidas.
No sólo se ha roto la línea (cuarta pared) entre productores y consumidores tradicionales de contenidos (el “prosumidor”, del que ya habló Alvin Toffler en 1980) sino que también se borran las fronteras entre lo cotidiano y lo heroico (los “pequeños” relatos sobre la vida diaria cobran protagonismo), entre lo artístico/culto y lo popular, y también, y no menos importante, entre lo intelectual y lo emocional. Revalorizar lo cotidiano (emocional, popular, pequeño, fugaz, íntimo, no nombrado, no valorado socialmente…) frente a lo que hasta ahora se le oponía y parecía superior: lo heroico, lo intelectual, lo culto, lo político…
La web 2.0, formada por las redes sociales, blogs, wikis, foros y chats (clasificación que cada vez se hace más difícil, las distinciones se acortan) es hoy el gran crisol donde se cocinan los relatos de lo cotidiano.
Lo cotidiano hoy se escribe, se comparte, se expone y se debate en las webs, foros y blogs, para revelarse con un gran sentido público y político: la ecología, la ciudadanía, los feminismos, los discursos gay y lésbicos… los discursos tradicionalmente al margen de los Parlamentos, las agendas políticas y los grandes medios, tienen en la red el medio ideal de expresión y no menos importante, de vinculación.
La Red, las redes, son en primer lugar, una nueva estructura tecnológica, pero también una nueva estructura social y mental, cuyo no-centro es el entramado, el vínculo, la conexión. La estructura en red tecnológica es una estructura en red social y global.
No son simplemente electrónicos: los vínculos humanos son siempre emocionales. Y el paso de la razón a la emoción es otra de las principales características de la Era de la información: ‎"La sociedad necesita personas que se ocupen de los ancianos y que sepan cómo ser compasivos y honestos. La sociedad necesita gente que trabaje en los hospitales. La sociedad necesita todo tipo de habilidades que no son sólo cognitivas, son emocionales, son afectivas. No podemos montar la sociedad sobre datos", ha dicho el escritor estadounidense Alvin Toffler.
Las emociones son las reacciones humanas que nos permiten el vínculo, las relaciones con nuestros semejantes. Digamos que el “pegamento” que nos une, la fuerza de atracción hacia nuestros semejantes -o en su lugar, lo que nos separa: la repulsión, el odio, la violencia- es de naturaleza emocional.
El futuro del planeta pasa por estas nuevas redes, tecnológicas pero –a la vez y no en lugar de- emocionales, que alimenten las emociones positivas (entendidas como amor, afecto, empatía, solidaridad, vínculo, capacidad de cuidado) y que pasan por lo cotidiano, lo íntimo, lo doméstico, lo sexual… La felicidad, según macro-estudio que ha realizado sobre ella la Universidad de Harvard, depende de la capacidad de amar y ser amados. Michel Odent, cirujano francés al frente de un proyecto de investigación de gran envergadura sobre salud primal, ha afirmado a su vez que la capacidad de amar (por tanto de vincularse) de los seres humanos se desarrolla de manera crítica en el período que rodea al nacimiento.
Así, la maternidad consciente y gozosa, la crianza respetuosa, la concepción de la familia no como lugar de dominación sino como lugar primario de vínculo, la conciliación trabajo-familia, la recuperación de lo femenino, la relación entre el mundo productivo y el reproductivo… aspectos encerrados tradicionalmente en el ámbito de lo privado y lo invisible, se vuelve hoy categoría filosófica de primer orden hacia un nuevo humanismo, basado en la sostenibilidad y en el cuidado: El cuidado incluye un cierto modo de estar-en-el-mundo-con-los-otros y una determinada praxis, protectora de la naturaleza. No sin razón, una tradición filosófica que viene de la antigüedad y que culmina en Heidegger y en Winnicott define la naturaleza del ser humano como un ser de cuidado. Sin el cuidado esencial él no estaría aquí, ni el mundo que le rodea. Sostenibilidad y cuidado, juntos, nos muestran el camino a seguir”, ha dicho el teólogo Leonardo Boff.
La «blogosfera maternal», foros, webs y espacios de apoyo a la crianza, muchos de ellos en nombre de –o que han dado lugar a- asociaciones de apoyo a la maternidad, la lactancia -en fin, al cuidado esencial y primario del ser humano-  permiten el paso del texto a la vida y de la vida al texto, y encarnan, quizás como ningún otro espacio discursivo en la actualidad, la imbricación de las tendencias inevitables que se abren cauce en el siglo XXI: las redes sociales, los vínculos, lo cotidiano, las emociones, la sostenibilidad y el cuidado.