Salvemos el marketing
A principios del año comenzamos a publicar en las redes sociales, en la prensa, en la radio y en la vía pública nuestro manifiesto, nuestra ambiciosa plataforma que da inicio a un nuevo decálogo del marketing. Una propuesta que desde ExpoMarketing busca despertar conciencia en cada uno de los que hacemos mercadeo con la intención de transformar la manera en que trabajamos y entender mejor el marketing, un marketing más disciplinado, mejor estudiado, más aterrizado, más responsable, más simple, más honesto, más científico, con más compromiso, con efectividad, y que logre integrar cada punto de contacto con nuestro consumidor para inspirarlo, brindarle su reconocimiento y, obviamente, respetarlo.
Esta es nuestra consigna, este es nuestro lema y esta es nuestra invitación a que todos los que trabajamos a diario en esta grandiosa y apasionante actividad toquemos el corazón de millones de nuestros consumidores, reflexionemos y pongamos nuestro granito de arena por un nuevo y mejor mercadeo.
¿Por qué tenemos que salvar el marketing y de quién?
De los “gurús” vendehumo
- Personajes que de la noche a la mañana surgieron como expertos en marketing con el solo hecho de tener 5.000 seguidores en Twitter.
- De aquellos que abren su propia agencia de redes sociales pero la camuflan como “agencia de estrategia digital”, sin entender lo mínimo que el cliente desea o necesita.
- De aquellos geeks que lograban hacer una página bonita pero que ni siquiera era reconocida por un buscador.
- De personajes que al posicionar un hashtag en Twitter como tendencia, piensan que hicieron la mejor estrategia de marketing y se ilusionan al creer que eso es un caso de éxito porque alcanzó muchos retuits.
De los clientes con malos briefs (o de la aceptación de los malos briefs)
- El brief es el corazón de cualquier proyecto, y si existe un mal input habrá un mal
- El brief no debería ser un crucigrama irresoluble.
- El brief no debería ser un rompecabezas sin guía.
- El brief tiene que ser un documento tan claro y tan preciso que pueda demostrar el conocimiento tácito y real del gerente de la marca, el problema de su producto y la necesidad que hay que cubrir.
- Los más grandes enemigos: la pereza, el afán y el desconocimiento real de lo que se quiere. Si no hay certeza de lo que se quiere, no la habrá de lo que se entregue.
De las agencias con “creativos divos”
- Si cuando se llega a una agencia de publicidad y lo primero que se ve en la entrada son los trofeos, ¡hay que asustarse!, porque probablemente detrás de ello no hay una intención de construir marca o brindar soluciones reales, sino de ganar premios para seguir inflando el ego.
De los gerentes y las agencias de escritorio
- Salvemos el marketing de los que piensan que un nuevo estudio y muchas horas de reuniones pueden convertir una estrategia en una gran ejecución.
- Hay que hacer que los equipos de trabajo salgan a la calle, se sumerjan donde sucede la acción y definan una rutina de observación en el campo; el campo de batalla que vive cada marca es la calle.
De las campañas sexis sin retorno de inversión
- Todos aquellos que trabajan en mercadeo lo hacen para mover la caja registradora. Ese es el fin. Por supuesto que se quiere un mejor valor de marca y estar presente en la mente del consumidor, por supuesto que se quiere una campaña digna de free press y que se convierta en viral, pero estrategia que no mueve la caja registradora ni es un caso de éxito no se debe considerar como tal.
- El hecho de tener miles de views en YouTube y cientos de likes en Facebook no quiere decir que sea una campaña exitosa. La conversión del like a la compra debe estar presente. Por eso es que muchas de las marcas que pautan en Facebook deberían entender el balance correcto y enfocar sus esfuerzos en el punto de venta y en el momento de la verdad.
De los que gritan a los cuatro vientos que son los más innovadores
- Y sus campañas terminan siendo tradicionalistas, conservadoras y, simplemente, irrelevantes.
- Y sus estrategias están basadas en insights de otro país e, incluso, utilizan el marketing book La innovación va de la mano con el entendimiento, la conceptualización y la acción.
De los que pensaron que al terminar su carrera tendrían “todo” el conocimiento del consumidor futuro
- ¿Cuántos libros de mercadeo, de estrategia o de negocio se ha leído al mes? ¿Cuántos cursos de capacitación o entrenamiento ha tomado al año? ¿Qué tan frecuente se actualiza con conferencias, audios, textos e información relevante que lo haga conocer a los nuevos consumidores y su entorno?
- El consumidor de hoy es cada vez más exigente, ahora ya nadie come cuento; por eso hay que tener las herramientas y el conocimiento suficientes para persuadir a las personas que están allá afuera o dentro de la internet. El marketing de hoy ha trascendido.
De los que quieren todo rápido, bueno, bonito y barato
- Salvemos el marketing es una iniciativa para que dejemos de pensar que en 24 horas se generan grandes estrategias. Las estrategias y los buenos proyectos llevan tiempo, se requiere disponer del mejor personal y éste no debe ser barato.
Salvemos el marketing de adentro hacia afuera, de manera integral, para transformar el mercado y llevarlo a otro nivel. Lograrlo está en las manos de todos aquellos que tienen relación con el mercadeo, su responsabilidad es aportar un granito de arena a la industria. “O nos diferenciamos o nos extinguimos”. Cuando se comprenda lo anterior, los imposibles se convertirán en agallas, el cansancio se volverá una fuente de energía y la pasión simplemente comenzará a fluir.