Con Benjamín a la guitarra, Paulo en los teclados, y quien les escribe encargado de las melodías en la laptop (un órgano prog y el bajo), este experimento quizá más adelante redunde en algo hecho ya de manera profesional e intencionada... mientras tanto, hay que saber disfrutar de los pequeños momentos experimentando... no, no con ácidos... con música.
Con Benjamín a la guitarra, Paulo en los teclados, y quien les escribe encargado de las melodías en la laptop (un órgano prog y el bajo), este experimento quizá más adelante redunde en algo hecho ya de manera profesional e intencionada... mientras tanto, hay que saber disfrutar de los pequeños momentos experimentando... no, no con ácidos... con música.