Unos años atrás usaba muchísimo el eye-liner líquido para maquillarme los ojos y ahora en cambio uso más a menudo las sombras para delinear, así que me ocurre que los eye-liners en gel que vienen en un frasquito se me suelen secar y me he aficionado a otras variedades como el Eye-liner Écriture de Chanel del que hoy os quiero hablar porque me encanta!
El Eye-liner Écriture de Chanel es un delineador líquido para los ojos que viene presentado en el formato que yo llamo “bolígrafo” o “rotulador”, es decir, que el producto líquido está dentro del delineador y lleva incorpora un pincel aplicador de fieltro y no de pelitos sueltos, de manera que el trazo es uniforme y preciso. Realmente es mi tipo de aplicador favorito y hace años que uso este tipo de aplicadores (hace años usaba uno de Helena Rubinstein que era mi favorito, pero dejaron de fabricarlo y ahora ni siquiera encontramos ya esta marca en España, lamentablemente). También he usado (y uso de vez en cuando) eye-liners en gel aplicados con un pincel finito pero reconozco que este tipo de producto requiere un poquito más de práctica y es algo más difícil de usar.
Pues bien, como os decía la principal característica del eye-liner Écriture de Chanel es su pincel aplicador, que marca la diferencia con otros productos e incluso con otros aplicadores del mismo estilo que hay en el mercado, de otras marcas (y también de otros precios). El delineador tiene un aplicador muy suave y flexible, que se adapta a la forma del ojo con mucha facilidad, de manera que realizar el trazo es fácil y queda de manera homogénea bien aplicado a lo largo de todo el ojo. Al tener la punta bien finita no es difícil tampoco realizar el final del delineado ya que lo podemos graduar a la medida que queramos y levantarlo más o menos, alargarlo hasta donde queramos, modificarlo, etc.
Otro aspecto que me gusta mucho es que el color es intenso y cubriente, de un negro intenso (aunque también está disponible en color marrón, yo uso el negro). Hay algunos eye-liners líquidos que son demasiado acuosos y no sólo se corren con mucha facilidad sino que además dejan un trazo que se medio-transparente y hay que repasar varias veces para darle intensidad. El problema viene cuando al repasar los trazos no siempre quedan homogéneos y acabamos con un trazo demasiado grueso y sobretodo, muy irregular. Pues bien, eso no ocurre con el eye-liner Écriture de Chanel ya que el trazo final siempre queda bien homogéneo y regular. El color además se mantiene intacto ya que es un producto de larga duración, que no se mueve a lo largo e la horas y cuyo color no se desvanece. Para eliminarlo siempre es mejor usar un producto de calidad, a poder ser bifásico, ya que los eye-liners suelen requerir productos de desmaquilladora más intensos y generalmente uno muy suave o un agua micelar no suele servir (¡al menos a mi!)
El precio del eye-liner Écriture de Chanel ronda los 33€ y lo podéis encontrar en perfumerías especializadas y El Corte Inglés. Sin duda no es un producto barato, pero en mi opinión, vale cada euro que cuesta y es un básico de neceser que si sois aficionadas a usar eye-liner clásico, agradeceréis por la comodidad y el buen resultado que ofrece.
¿Lo habéis probado?