Pero dejadme que os argumente, como debe ser. ¡Vamos al lío! 1. El "viejo amigo": Liquid Ink de Essence.
2. Y llegó la sorpresa: eyeliners dobles de Debby
Caminando por los pasillos del Bodybell donde compré el eyeliner de Essence, me topé con estos eyeliners de Debby que es una marca de la que algo había leído pero que nunca había probado. El formato me pareció super original y práctico: un tubo con dos puntas, en una tenemos el delineador y en la otra la máscara de pestañas. Ojo porque la máscara es negra, no del color del eyeliner (cosa que habría sido un puntazo, la verdad). Me costaron 7'95 y si no recuerdo mal, había también en marrón y negro.
Pues bien, mi decepción viene cuando los aplico: aparte de que el pincel no es flexible - yo los prefiero así porque se adaptan mejor a la forma de mi ojo - la trazada no es homogénea :(
Detalle de la punta del eyeliner
Abajo veis perfectamente lo que digo: con una pasada, el producto no queda homogéneo por lo que hay que dar varias, cayendo con más facilidad en el tema de que nuestro delineado quede más grueso de lo deseable.
Así que, la verdad es que ha sido una toma de contacto con la marca bastante mejorable. Los tonos me parecen preciosos (el azul eléctrico, especialmente) y la idea, práctica (la máscara, sin ser nada del otro mundo, no va mal). El pincel no es de mis favoritos, pero puedo pasarlo...pero el tema de cómo queda el producto...mal. Muy mal. De manera que, los iré intentando gastar, pero desde luego no os los recomiendo. En estos días los veréis en varios looks.
¿Habéis probado algo de Debby?
¡¡BESOS!!