Fabada asturiana

Por Recetasalicia

Atreverse con este plato tradicional y suculento, al menos una vez al año y cuando el frío aprieta no debe dejarnos con cargos de conciencia. En casa no lo hacemos con frecuencia, mal contadas cuatro o cinco veces anuales, que no es nada comparado con otras comidas, que siempre y por cuestiones saludables, se prodigan día a día.
Además, romper la tradición porque sí no me parece bien. Hay que defender nuestras costumbres, sin abusar. En nuestra vida todo no debe ser blanco o negro, nunca me gustaron los extremos.
Y dejando teorías a un  lado "nos dejamos caer" en el pote de barro que va a ir cociendo a fuego lento y trabando este plato de la gastronomía asturiana, que hoy es cocinado por una andaluza y que por lo tanto puede no ajustarse a la fabada auténtica.
He usado esta vez alubias de la Granja de Segovia, en lugar de las fabes típicas asturianas, ambas son deliciosas.
Una receta que viene ya prácticamente a despedir el invierno.
Saludos afectuosos para mis compañeras y amigas asturianas.

Ingredientes:


- Alubias de la Granja de Segovia 250 g.- Chorizo al humo de haya 1.- Morcilla al humo de haya 1.- Panceta de cerdo ahumada 60 g.- Tocino ibérico, unas laminitas.- Hueso de jamón.- Jamón serrano en taco 40 g.
Elaboración:
La víspera dejamos en bastante agua fría las alubias (mínimo 12 horas), deben quedar bien cubiertas.

En una cacerola ponemos agua a hervir y cocemos durante quince minutos el chorizo, la panceta y el hueso de jamón. Pasado este tiempo tiramos el caldo.

En un pote de barro echamos las alubias escurridas, les incorporamos el trozo de jamón y lo hervido (la morcilla la dejamos para el final). Cubrimos de agua, un par de dedos por encima.

Cuando rompan a hervir, interrumpimos tres veces la cocción con agua fría y bajamos la llama al medio. Reparamos cuando se consuma el caldo para mantener siempre tres,cuatro dedos por encima de las legumbres.

Tapamos. Cocemos tres horas cimbreando de vez en cuando el pote de las asas. Quince minutos antes de retirarlas incorporamos la morcilla (también le doy unos minutos de cocción antes de echarla, para desgrasarla algo).
Dejamos que repose una hora. Servimos caliente con el embutido troceado.