Existen una serie de factores, empezando por el propio fotógrafo que se pone tras la cámara para capturar un determinado momento que influyen en el resultado y en la calidad de la imagen.
Hacer buenas fotografías no es sencillo, eso lo sabemos todos. Son muchos los factores que intervienen en este proceso para conseguir un gran resultado, no sólo desde el punto de vista técnico, sino también desde el punto de vista estético y artístico. Veamos estos factores que influyen en la calidad de la imagen, para así, poder trabajar sobre ellos y mejorar nuestra técnica y estilo fotográfico.
Fotógrafo.
No sólo la técnica es importante, tampoco el equipo que utilicemos, el factor fundamental es quién hace la foto. Así que la mejor manera de mejora la calidad de nuestras fotografías es que mejoremos nosotros y mejoren nuestras capacidades y conocimientos sobre fotografía. Un buen fotógrafo no se mide por su equipo, sino por sus resultados.
Equipo.
Aunque pueda parecer que contradiga el punto anterior, la calidad de la imagen se ve afectada por el tipo de equipo que se utilice. En el proceso en el que el fotógrafo transforma lo que ve a través de su ojo en una captura en formato físico o digital, pero bidimensional, el equipo y la técnica serán las responsables del resultado de este proceso. Hay determinados equipos que pueden ser fácilmente reconocibles por su resultado, por ejemplo en fotografía analógica el tipo de película, o, en general, el objetivo que se use, que dará un determinado resultado en función de sus características. Por eso, volviendo al primer punto si, como fotógrafos, conocemos cómo funcionan estos equipo y cómo obtener los mejores resultados de ellos, tendremos mayores posibilidades de mejorar en nuestra fotografía.
Iluminación.
El contraste, la dirección de la luz, el color, la calidad de la luz, las texturas, el tono, son propiedades que varían en función de la luz. Un objeto bien iluminado fotografiado con una cámara compacta normalucha puede derivar en una buena fotografía, un objeto mal iluminado, oscuro o con reflejos imposibles fotografiado con la mejor cámara puede ser resultar en la peor fotografía que se haya visto. Por eso es importante conocer las posibilidades de la iluminación, aprender a trabajar y configurar sets de iluminación en estudio, aprender a usar reflectores y y utilizarlos en exteriores, saber aprovechar la luz natural para conseguir buenas resultados. La luz es la base de la fotografía, así que si no sabemos controlarla, dirigirla y manipularla a nuestro antojo, carecemos de conocimientos básicos.
Calidad del objetivo.
El tipo de objetivo que utilicemos, claramente, hará variar los resultados, no sólo por su tamaño y angulación, también por lo luminoso que sea, su nitidez, si tiene estabilizador o no, o el material con el que esté hecho. Este punto es peliagudo, porque la inversión en objetivos es importante y tendremos que seleccionar y ser meticulosos en ello para conseguir el mejor resultado posible.
Interesante en el proceso de selección de nuestros objetivos es decidir si nos decantamos por lentes fijas u objetivos zoom. Las lentes de distancia focal fija, tienen la ventaja de estar diseñadas para trabajar a una focal fija y eso va a repercutir en su calidad final, pero los zoom son más versátiles y, actualmente, los resultados trabajando con este tipo de objetivo están siendo cada vez mejores, con posibilidades de trabajar a niveles de detalle muy interesantes.
Tamaño del sensor y sensibilidad.
El tamaño del sensor influye en la calidad de la imagen y el tipo de sensor también. Esto afecta directamente sobre uno de los parámetros de ajuste, la sensibilidad. Actualmente se están desarrollando importantes mejoras en los sensores, por lo que la calidad de la imagen e fotografía digital se está viendo incrementada. Sólo hay que ver la evolución de las cámaras de los dispositivos móviles para darse cuenta de que aquella teoría del incipiente mercado de la fotografía digital que estipulaba que a mayor sensor mayor calidad está totalmente superada.
Los actuales sensores full frame, los CMOS desarrollados por Fujifilm y Panasonic que supondrán una importante mejora en el mundo del sensor están siendo protagonistas de una evolución de la calidad de la imagen a pasos agigantados.
Esto en fotografía digital, porque en analógica, la calidad del resultado está en las posibilidades de ampliación del negativo al pasar a positivo y la sensibilidad, más que delimitar la calidad, lo que fija son diferentes criterios estéticos que influirán en la cantidad y calidad del grano para conseguir unos resultados determinados. Son diferentes, por tanto, los criterios que tendremos que tener en cuenta cuando utilicemos un tipo de soporte fotográfico u otro.
Tratamiento de la imagen
EL trabajo del técnico de laboratorio en el revelado de la imagen es crucial para conseguir un determinado resultado en las fotografías, en función de los tiempos de exposición y en la capacidad de poder exponer por zonas, realizar diferentes ajustes con determinados filtros, etc. El tratamiento de la imagen digital, el revelado digital, también influirá en la calidad de la imagen. Acuérdate de mantener una copia digital original sin ningún tipo de ajuste (como si fuera un negativo) para tener un original sobre el que trabajar y realiza el revelado con cautela; unos ajustes mal hechos dan peor resultado que una imagen sin tratar.
Pantalla, perfil y calibración.
El ordenador que utilicemos, sobre todo la pantalla y su calibración serán también importantes en el resultado final del trabajo con nuestra imagen. Un monitor mal calibrado o con un perfil de color incorrecto puede derivar en fotografías con colores totalmente diferentes a lo que buscábamos.
Son detalles que muchas veces no tenemos en cuenta cuando trabajamos con nuestras fotografías, pero importantísimos para conseguir una imagen con los colores adecuados.
Todos estos factores que he mencionado y alguno que otro que seguro se me ha quedado en el tintero son posibilidades con las que podemos y debemos trabajar y tener en cuenta para conseguir unos mejores resultados. Ya veis que no hablo de formatos de compresión porque el trabajo asumo que se realizará en RAW (aún así cuidado con la edición y conversión en este formato).
Pero no nos confundamos, el resultado final y la consecución de una buena fotografía estará siempre en nuestras manos, en cómo trabajemos y en cómo sepamos plasmar nuestra mirada en una captura que realizaremos en tan sólo un instante. Así que paciencia, constancia y a fotografiar.