Portada de Falcó, de Arturo Pérez-Reverte.
Lorenzo Falcó es un mercenario al servicio del bando nacional durante la Guerra Civil española, al que encomiendan una complicada misión en zona enemiga, concretamente en el Levante republicano, donde al menor indicio de afinidad al bando sublevado las torturas y las ejecuciones se realizan de inmediato. Para ello, contará con la ayuda de agentes infiltrados, pero... ¿de qué bando?Y hasta aquí puedo contar. Cualquier apunte más acerca del argumento del libro sería destripar demasiado en una trama donde se mezclan los hechos históricos con la ficción. Unos hechos que nos llevan hasta uno de los momentos más importantes y sangrientos de la historia de España, la Guerra Civil. Pérez-Reverte se aventura con una novela narrada desde el bando nacional, algo poco habitual en la literatura española, donde detalla con gran maestría la vida durante aquellos años convulsos: los saqueos, la pillería, el abuso de poder, los asesinatos sin control, el odio, la crudeza de una guerra que dividió España en dos y que destrozó la vida de muchísimas familias.Nuestro protagonista, Lorenzo Falcó, es un hombre brutal, un James Bond de la época, un mercenario mujeriego, sin control, sin escrúpulos, un asesino, un audaz espía que luchó y sirvió a la República y que ahora lo hace para el bando contrario, un soldado preparado para ejecutar el trabajo sucio. Pero, a lo largo del libro nos mostrará otra cara, un Falcó decente y agradecido. Así pues, Arturo Pérez-Reverte nos presenta un personaje muy complejo, al que se toma aprecio conforme se avanza con la lectura.
'Falcó' me ha encantado, me ha parecido una gran novela de espías. No puedo esconder que tengo debilidad por Arturo Pérez-Reverte y por su escritura. Recomiendo mucho su lectura.