Fallece Santiago Carrillo

Publicado el 19 septiembre 2012 por Jediloy @jediloy

 

El Rey Don Juan Carlos, resaltó que Santiago Carrillo ha sido "una persona fundamental en la transición" política a la democracia, tras visitar la noche del martes el domicilio del histórico líder comunista para manifestar sus condolencias a la viuda, Carmen Menéndez, y a sus tres hijos. Así lo ha expresado el rey, ante los periodistas, al abandonar la vivienda de Carrillo, en el centro de Madrid, donde los reyes permanecieron con su familia en torno a un cuarto de hora.
Las cenizas del  Secretario general del Partido Comunista de España entre 1960 y 1982, serán esparcidas en el mar de Gijón, como era  su expreso deseo. EL DATO: En el exilio de París, en 1975, le confesó a José Martí Gómez que necesitaba volver, solo, a Gijón y Avilés, las ciudades de su infancia. (Lea en Lamentable.org "La aristócrata y el comunista: una historia de laTransición", un largo relato publicado al cumplirse el pasado mes de abril 35 años de la legalización del PCE.
La noticia cubre todas las planas de la tarde en la prensa española. Uno de los protagonistas de la Transición, Santiago Carrillo, sucumbió el martes en Madrid, a los 97 años.
 
Su fecunda vida deja tras de sí casi un siglo de grandes acontecimientos de la historia de España. Los hechos que la marcaron y que le afianzaron como un férreo revolucionario comunista quedan en la revolución de 1934, la Guerra Civil, el exilio y la evolución del estalinismo al “eurocomunismo”.
 
Después de 22 años de liderazgo político, Carrillo dimitió como secretario general del PCE  una vez confirmado que su partido había sido relegado definitivamente por el PSOE en la confianza electoral de la izquierda.
 
En 1985, fue excluido del PCE, y ya en lo sucesivo fue un observador justiciero de la actualidad en el fundamento de su vida, que aunque muchos cuestionan, fue un signo que marcó el legado de la democracia española.
 
Escribió libros, artículos periodísticos y destacó en intervenciones radiadas, en fin, una vida activa, llena de lucidez hasta su muerte ocurrida este martes.
 
Hoy los medios recuerdan a un Carrillo adolescente cuando inició su desandar por la política. Con 19 años de edad ya era secretario general de las Juventudes Socialistas, y en abril de 1934 se integró en el comité que intentó preparar la insurrección de octubre frente a la derecha republicana en el poder.
 
Relata hoy El País que "ese comité, que se miraba en el espejo de los bolcheviques, estaba apoyado por el sector radical del PSOE, seguidor de Francisco Largo Caballero, y en un primer momento también por el más pragmático Indalecio Prieto, frente al ala más moderada de Julián Besteiro".
 
Recuerda el principal diario español que la insurrección se limitó finalmente a Asturias y fracasó en el resto de España. Por eso, Carrillo fue encarcelado junto con los demás miembros del comité revolucionario. “A estas alturas yo estaba plenamente ganado para las ideas leninistas sobre el Partido y la Revolución”, ha dejado escrito, “pero empeñado a la vez en que el partido en el que yo había nacido y comenzaba a actuar, el PSOE, y sus Juventudes fueran quienes asumieran el papel de protagonistas de la revolución”.
 
Santiago Carrillo salió de prisión el 17 de febrero de 1936, al día siguiente del triunfo electoral del Frente Popular, cuando quedaban solo cuatro meses para la rebelión militar que dio origen a la Guerra Civil. En ese periodo, un Carrillo deslumbrado por aquel Moscú al que se veía como la meca del proletariado, se dedicó a la unificación de las Juventudes socialistas y comunistas, pero con la vista puesta en la Internacional Comunista.
 
RETORNO A ESPAÑA

En 1976, meses después de la muerte de Franco, regresó a España de manera clandestina para forzar al Gobierno de Suárez a negociar la legalización del PCE. En abril de 1977, el Gobierno de Adolfo Suárez legalizó el Partido Comunista y, poco después, Carrillo fue elegido diputado por Madrid en las primeras elecciones democráticas.
ElHuffPost recuerda hoy que “sin perjuicio de los elogios a su persona por su gallarda actitud en el golpe de Estado del 23-F, cuando se negó a tirarse al suelo contra las órdenes de Tejero y sus golpistas, el PCE vivió una sucesión de enfrentamientos internos entre los partidarios de una franca renovación y otros sectores. Con el liderazgo de Carrillo cada vez más cuestionado, el pueblo de izquierdas sancionó definitivamente la tensión PSOE-PCE otorgando al primero 202 diputados en las elecciones de 1982, frente a 4 para el PCE”.
Las diferencias entre socialistas y comunistas españoles duran hasta nuestros días y los remordimientos se sobreponen.
El ojo siempre avizor de Carrillo se fundamenta en su papel de activo y crítico observador de la vida política española, especialmente preocupado por la dureza adoptada por el PP durante los años de gobierno de Zapatero. Y durante todos los tiempos.

Santiago Carrillo manda al infierno a Luis del Olmo

Una de las veces en que Santiago Carrillo perdió su paciencia fue en una entrevista del periodista Luis del Olmo. Santiago Carrillo le manda soberanamente al infierno cuando Del Olmo le pregunta por Paracuellos incinuándole un supuesto vículo con las llamadas matanzas de Paracuellos durante la Batalla de Madrid, en el transcurso de la Guerra Civil Española, y que llevaron a la muerte de varios miles de prisioneros considerados opuestos al bando republicano. Escuche el fragmento.



 
 

Una entrevista, breve, concisa, que nos aproxima a su vida, la concedió al cumplir 90 años a Informe Semanal de TVE