BILBAO 27 AGOSTO 2017. TOROS DE MIURA, flojos, algo peligrosos, el mejor el sexto. Un cuarto de plaza. FORTES.- Saludos desde el tercio; Silencio. JUAN LEAL.- Vuelta y vuelta. ROMAN.- Al tercio, oreja.
FALTA REPERTORIO. Por Francisco Picornell
La corrida de Miura ha salido con cierto peligro, salvo el último que fue el mejor: Todos perdieron las manos. FORTES, en el primero de la tarde se cayó delante de él al dar un traspiés, afortunadamente no pasó nada. Cundió el pánico en banderillas y no las intentaban clavar, las tiraban como si fuesen dardos. Empezó la faena con unos doblones, pero el miura le toca la muleta. Con la izquierda se queda a mitad, muy parado. Creo que si le hubiera dado distancia y tomado el toro de lejos hubiera sacado mas partido. En el cuarto, que perdió las manos y fue por ello protestado, como fueron protestados los banderilleros. Fortes no sabe si tomar criada o ponerse a servir. Mantazos mil. Dos pinchazos, estocada desprendida, trasera y tendida. Silencio. Supongo que no seguirán diciendo sus corifeos que lo han tratado mal, como dijeron el día de su fracasada encerrona en Málaga y si lo dicen, pues que lo digan.
En el segundo de la tarde JUAN LEAL, anduvo aperreado. Era un miura muy codicioso de salida. Inició la faena con un pase cambiad por la espalda que le toca la muleta y casi se la quita. Creo que lo ahogó y permitió muchos enganchones de la muleta. Se lo echa a los lomos. Estuvo a merced del toro. Estocada desprendida. Petición de oreja minoritaria que no se concedió con buen criterio. Vuelta. Saludaron tras parear al quinto Marcos Leal y Manolo de los Reyes. El toro se para y da mantazos. Con la izquierda enganchones. No pudo colocar la faena que traía del hotel…otro día será. Vuelta.
Cerraba el cartel ROMÁN, que en el tercero dio pocos pases y muchos paseos. Al final sacó algún derechazo potable, mientras que con la siniestra instrumentó medios pases porque el miura se paró. El sexto fue el mejor de la tarde, mas por ello no le quito la condición de inválido. Hizo una faena aseadita, pese a que con la izquierda le tocó el engaño. Estocada delantera. Oreja.
Decía líneas más arriba que falta repertorio. Los coletudos de hoy no lo tienen; a todos los toros le quieren colocar la faena de mil derechazos y dos mil naturales y el toreo no es eso. Torear es dar a cada toro lo suyo. Se han olvidado del toreo por bajo, que era el que le convenía a los miuras ese toreo que Corrochano en el libro ¿Qué es torear? Define como “Torear por bajo es sacar la muleta en el remate del pase, por debajo del belfo del toro, y al mismo tiempo dar un paso adelante con la pierna contraria, pegándose al toro, como metiéndose en el toro, para cuando este vuelva en busca de la muleta que ha perdido ligarle el pase siguiente con lo que cada vez se le va ganando terreno al toro….” Eso la torería de hoy no sabe hacerlo. Estoy seguro de que si uno lo hiciera se caía la plaza.
Se me objetará que los diestros estuvieron muy valientes, acepto, pero eso no es torear. La valentía en un torero, se le supone como dicen de los soldados.
Al fin terminó Bilbao, que no hace sino que me ratifique en que la fiesta está cada día peor, que se la van cargando los propios taurinos. En Málaga la entrada fue una ruina y, me temo, que en Bilbao también. El día de Ponce creo que fue el mejor y hubo tres cuartos de plaza. Claro que los taurinos tienen escusas para todo, que si juega el Bilbao, que si entrena el Indautxu, dicho en Euskera, en fin escusas.